Pese a que en los últimos tiempos, muchas voces criticas con el separatismo destacaban su presunta desunión, una y otra vez la izquierda y la derecha secesionista se muestra más cercana entre sí que con el progresismo y el conservadurismo del resto del Estado. Y hoy ha vuelto a quedar de manifiesto. No en vano, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha proclamado hoy en el Palau de la Generalitat que es necesario que el nacionalismo catalán se agrupe en un «frente común» ante las elecciones convocadas por Pedro Sánchez el próximo 23 de julio.
Así, ha abogado por encontrar «formulas y encajes» que permitan al separatismo «defender los derechos y libertades en Cataluña». La respuesta del secretario general de Junts per Catalunya, Jordi Turull, no se ha hecho esperar: «Si la rectificación es sincera, nos podemos reunir mañana mismo». Y ha aclarado: «Juntos defendemos un frente unitario para frenar esta España y para avanzar hacia la independencia».