Un total de 1.108.175 barceloneses están llamados a las urnas el próximo domingo para elegir a su nuevo alcalde o alcaldesa. Con respecto a 2007, son 76.549 menos que los que figuraban entonces en el censo electoral barcelonés, según las cifras proporcionadas por el Consistorio de la capital catalana. El descenso puede ser aún mayor puesto que en 2007 existía el censo de españoles residentes ausentes (CERA), que, en el caso de Barcelona, estaba formado en aquel año por 55.681 personas. Pero el CERA desapareció en 2011 y, desde entonces, estos españoles residentes ausentes se incluyen el en censo electoral de residentes.
En lo que al censo de extranjeros residentes en España y con derecho a voto en las municipales se refiere, en 2007 estaba integrado por 14.994 personas. Ahora, en 2023, están registrados en el mismo un total de 21.131 ciudadanos.
Por distritos, todos los barrios de la capital catalana han perdido votantes. El descenso más elevado se ha producido en el Eixample, cuyo censo electoral ha pasado de tener en 2007 un total de 206.402 votantes a 176.527 en este 2023. Le sigue Ciutat Vella, cuyo censo electoral ha perdido 16.770 personas, al pasar de 62.592 a 45.822. En Gràcia la bajada ha sido de 13.110 electores, mientras que en Sants-Montjuïc está cifrada en 11.829. En el resto de barrios barceloneses, se ha experimentado la misma pérdida de electores, aunque el menos afectado por esta situación es el de Sarrià-Sant Gervasi, donde se ha pasado de un censo de 110.285 personas a otro de 105.421.