La ministra de Igualdad, Irene Montero, está estos días en campaña con Unidas Podemos. Este miércoles se ha trasladado hasta Valencia, ciudad en la que ha tenido un desagradable encontronazo con una mujer que la ha cuestionado por la controvertida compra del chalet de Galapagar. La ministra ha reaccionado de forma agresiva, alzando la voz y explicando que si ha podido acceder a esta vivienda ha sido por la herencia de su padre y porque, junto a su pareja, el ex vicepresidente del Gobierno y exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, puede comprarse la casa que le plaza.
La mala reacción de Montero ha corrido como la pólvora en redes sociales como Twitter, donde la ministra ha recibido todo tipo de críticas por su actitud.