Agentes de la División de Investigación Criminal (DIC) de la Unidad Central de Atracos de los Mossos, en colaboración con las unidades de investigación de Girona, Santa Coloma de Farners, Mataró, Cerdanyola, Rubí y Manresa, detuvieron en Arbùcies el pasado 28 de marzo a un hombre de 31 años como presunto autor de ocho robos violentos en establecimientos comerciales. El joven cometió estos atracos entre septiembre y noviembre de 2022 en diversas localidades catalanas, según han informado los Mossos en un comunicado. El individuo ha sido enviado por el juez a prisión provisional.
La investigación se inició después de que los Mossos detectaran un aumento de robos violentos en establecimientos durante el último trimestre del año. Las primeras indagaciones policiales permitieron establecer una línea de investigación centrada en la autoría de un solo individuo que seguía siempre un mismo patrón de actuación. El atracador priorizaba el asalto de establecimientos de poblaciones pequeñas, situadas en áreas rurales o boscosas. Una vez escogido el objetivo, el joven hacía vigilancias, en algunos casos de diversas horas, para establecer rutinas y determinar el número de personas que podría haber en el interior del establecimiento antes de cometer el robo.
El ladrón, que siempre llevaba ropa oscura y ocultaba su rostro con un casco de motocicleta, esperaba «escondido en actitud de observación hasta que consideraba que podía cometer el robo con poco riesgo». «Entonces accedía al establecimiento e intimidaba los trabajadores con una pistola simulada, buscando dinero en efectivo», han explicado los Mossos en su comunicado, «una vez conseguido el objetivo, obligaba a los empleados de los comercios a entrar en algún despacho para evitar que pudieran aportar alguna información sobre su dirección de huida».