Desde su surgimiento, el Consell de la República de Carles Puigdemont en Bélgica tuvo la aspiración de convertirse en una suerte de Govern paralelo al de la Generalitat ubicado en «exilio». Sin embargo, ambos aspectos han sido ampliamente cuestionados, pues ni ejerce poder alguno ni su presunto exilio es considerado mayoritariamente como tal. Tal vez para tratar de escapar de esta irrelevancia, el organismo ha anunciado una reestructuración «para encarar con el máximo impulso y determinación la última cuarta parte de su mandato».
Así, Toni Castellà será portavoz del Govern y responsable de las relaciones partidistas y civiles —esto último, en colaboración con Teresa Vallverdú—; Montserrat Corrons, responsable de la coordinación de los Consejos Locales del Principado. Guillem Fuster, responsable de las relaciones con las instituciones municipales; Aurora Madaula, responsable de acción internacional; Mercè Jou, responsable de coordinación con los órganos internos del Consell. Finalmente, Carme Garcia, Lluís Llach y Lluís Puig, conservan sus actuales puestos: estructuras territoriales de los Países Catalens, consejero política y Cultura.