La portavoz nacional de Ciudadanos y candidata de esta formación a la presidencia del Govern balear, Patricia Guasp (Palma, 1977), ha tomado las riendas del partido junto a Adrián Vázquez y como representante de la corriente respaldada por la ex presidenta, Inés Arrimadas. Guasp considera que Ciudadanos sigue siendo una formación necesaria a nivel nacional para moderar tanto al socialista Pedro Sánchez como al conservador Alberto Núñez Feijóo. Del primero tiene claro que representa al PSOE “más a la izquierda”. Sobre el presidente del PP no duda en afirmar que es “un regionalista” y recuerda que, por ejemplo, Núñez Feijóo ha destinado a la inmersión lingüística en Galicia un presupuesto 10 veces mayor del que se consigna en Baleares para el fomento del catalán.
En Cataluña, Patricia Guasp observa con espanto cómo ERC exige ahora que se imponga la censura contra los constitucionalistas en los ayuntamientos y recuerda que Ciudadanos nunca ha apoyado a partidos como Vox cuando han pedido la ilegalización de las formaciones separatistas.
ERC ha propuesto en Cataluña un cordón sanitario contra Ciudadanos, Vox, Valents y el PP. Pide que en los ayuntamientos no se debatan sus mociones y no llegar a ningún tipo de acuerdo o pacto. ¿Qué le parece?
Una aberración más de los separatistas, que no respetan la democracia, ni el sentido del voto de las urnas, ni la pluralidad política. La pluralidad política es una de las bases de nuestra Constitución y una de las riquezas democráticas y liberales. Yo nunca voy a estar a favor de ningún cordón sanitario a ningún partido. Ni siquiera contra ellos. Los ciudadanos no se merecen esto. Yo condeno estas actuaciones por parte de los separatistas. También le recuerdo que cuando Vox ha llevado al Congreso la ilegalización de estos partidos, siempre hemos votado en contra. Creemos en la legitimidad de la democracia y, si no estamos de acuerdo, es en las urnas y en el debate parlamentario donde debemos hablar. Pero, en ningún caso, se puede estar de acuerdo con estos cordones. De todos modos, demuestran lo molesto que es Ciudadanos para los nacionalistas. Por otro lado, ahí está el PP de Feijóo diciendo que volverá a pactar con el PNV y esto hace que yo no me fíe nada de los partidos del bipartidismo, que siempre han necesitado a los nacionalistas.
Feijóo, la verdad, podría pasar perfectamente por un militante de la antigua Convergència. Su política de inmersión lingüística en Galicia tiene poco que envidiar a la que se aplica en Cataluña o en Baleares.
Cierto. En el Parlament balear a mí me sacaron que en Galicia, con Feijóo de presidente, hace un par de años, se gastaban 10 veces más en política lingüística que en las Islas. Es algo que no me esperaba. Pero nadie habla de esto. Feijóo es un regionalista. La verdad es que yo tengo al peor PSOE, el más de izquierdas, y el peor PP, porque es el más regionalista.
¿Cómo recomponer la situación de Ciudadanos en Cataluña? El partido nació allí y la marcha de Inés Arrimadas a Madrid decepcionó mucho a sus votantes. La situación hoy es muy delicada.
Creo que Inés Arrimadas ha demostrado que es importante estar en el Congreso para parar a Pedro Sánchez en esta continua erosión de las instituciones. Entre las cosas más aberrantes que hemos visto en estos últimos meses está la reducción del delito de malversación. Más allá de la sedición, esto me horroriza. El PP está calladísimo con esto. Y, a partir de esto, hemos visto cómo vuelven a salir numerosos casos de corrupción tanto del PP como del PSOE. A Aznar ya solo le quedan dos ministros sin imputar. De sus 14 ministros, 12 están imputados por corrupción. Y, con el PSOE, el remate ha sido el caso Mediador, que a todos nos repugna. ERC ha pactado esto con el PSOE.
Un acuerdo que ha beneficiado a ERC y que provoca que Carles Puigdemont te dé hasta pena porque es el más perjudicado.
Sí, a Junts en general. Estamos viendo como Junts sigue siendo el gran perdedor. En Cataluña, ERC se ha llevado los votos del centro-derecha. Es curiosísimo.
Quien mejor ha definido a Pere Aragonés ha sido su diputada y candidata al Ayuntamiento de Barcelona, Anna Grau, que desde el minuto 1 tuvo claro que el republicano quiere ser el nuevo Jordi Pujol.
Sí, es así. ERC quiere reemplazar a CiU y lo está haciendo. Por otro lado, Anna es una grandísima candidata para el Ayuntamiento de Barcelona. He estado con ella en Madrid y en Barcelona y es una todoterreno. Lleva poco en Ciudadanos pero tiene mucho mundo, mucha cultura… Se pueden ir algunos pero compensamos con personas como Anna Grau. Es un gran fichaje para Ciudadanos. Representa muy bien el centro, el liberalismo en estado puro.
La próxima semana se debatirá en el Congreso la moción de censura de Vox. Usted ha dicho que ni siquiera asistirá. Pero Ciudadanos apoyaba en diciembre esta moción. ¿Por qué han cambiado de postura?
Es que esta moción solo hace el juego a Sánchez. Se va a lucir y va a utilizar a Vox como espantajo. Yo no lo utilizaría ni en positivo ni en negativo, que es lo que están haciendo tanto el PSOE como el PP. Aquí vemos a Armengol haciendo lo mismo cuando dice “cuidado, que viene la extrema derecha”. Pero es para mantenerse en el poder. Y al PSOE esta moción le viene bien. Yo ya dije que votaremos en contra y que no iré al Congreso. Me parece todo un esperpento. En la calle la gente no habla de esto. Se habla de cómo llegar a final de mes o de cómo pagar la hipoteca. Lo veo en mi entorno. Nosotros queremos poner el foco en las familias, en las clases oprimidas, no participar en este circo.
