La presidenta suspendida del Parlament y líder de Junts, Laura Borràs, declarará este lunes ante el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), Jesús María Barrientos, como investigada por presuntos delitos de corrupción que habría realizado en su etapa como directora de la Institució de les Lletres Catalanes (ILC). El juicio contra Borràs llega a su séptima y penúltima jornada y por la sala ya han pasado otros acusados como Isaías Herrero, que se habría beneficiado del fraccionamiento de contratos públicos por el que Borràs tendrá que responder este lunes. Herrero, tras un posible pacto con la Fiscalía, ha acusado directamente a Borràs de lo sucedido.
Antes que Borràs, expondrá sus conclusiones en la sala el perito informático contratado por la defensa de la separatista, Emilio Hellín. Se trata de un ultraderechista que en 1982 fue condenado a 42 años de prisión por el secuestro y asesinato, dos años antes, de la joven Yolanda Gómez, militante del Partido Socialista de los Trabajadores. Con su pericial, Hellín intentará desacreditar pruebas fundamentales contra Laura Borràs, como los mails en los que le indicaba a Isaías Herrero de qué manera debía presentar los presupuestos para hacerse con las contrataciones de la ILC o audios enviados a algunos funcionarios en relación a estos contratos.
La acusación de Pagespetit
El juicio contra Laura Borràs comenzó hace dos semanas y, entre las declaraciones más destacadas, se encuentra de la funcionaria de la ILC Assumpta Pagespetit. Responsable de gestión administrativa de la ILC, Pagespetit quien ha asegurado que advirtió a Borràs sobre que los contratos con Isaías Herrero debían realizarse mediante concursos. También ha puesto de manifiesto que no le gustaba lo que entraba sucediendo en la ILC y que la forma de proceder de Borràs con Herrero contradecía las recomendaciones de la Generalitat sobre cómo debían realizarse este tipo de contratos.