Numerosos testimonios recabados en los últimos días por diversos medios de comunicación parecen confirmar que las hermanas gemelas de Sallent, de tan solo 12 años, tomaron la decisión de suicidarse tras haber sido víctimas de acoso en el instituto en el que estudiaban, el Llobregat. Una de ellas logró su objetivo. La otra permanece ahora mismo en la UCI del hospital Parc Taulí a la espera de nuevas intervenciones quirúrgicas.
El abuelo de las menores, Gustavo Fabián Lima, ha declarado en medios argentinos, país del que procedía la familia, que el acoso tendría dos vertientes. Por un lado, una de las niñas, Alana, había indicado su deseo de cambiar de sexo y habría pedido ser llamada Iván. Esto habría provocado que algunos compañeros se rieran de ella y la llamaran Ivana. Por otro lado, ambas ambas habrían sido también víctimas del acoso por su acento argentino y por no hablar catalán, según las declaraciones de sus familiares en diferentes medios, tanto argentinos como españoles.
Las niñas habrían dejado escritas sendas cartas de despedida. En el caso de Iván, el escrito señalaría la imposibilidad de encontrar la felicidad en sus condiciones: «Me quiero ir de acá porque no soy feliz y el resto de mi vida me parece que va a ser igual«. Su hermana, Leila, habría justificado la decisión de tirarse por el balcón de la casa familiar junto a Iván por amor a su hermana: «Yo amo a mi hermana, somos gemelas, yo voy con ella a todo lados, la amo y la decisión que ella tome la voy a acompañar«.
El cambio de opinión de Educación
Si bien en un primer momento el departamento de Educación descartó el acoso escolar como motivo del suicidio, el viernes cambió de opinión y el conseller Cambray anunció la apertura de una investigación al respecto. Anuncio que este sábado ha confirmado la secretaria de Transformación Educativa, Nùria Mora, en una entrevista con Rac1. Mora ha señalado que Educación quiere saber por qué el instituto no activó el protocolo contra acoso escolar. Y es que, al parecer, los padres de las niñas sí habrían alertado al centro de que sus hijas estaban siendo víctimas de esta situación.
Mora también ha explicado que la familia de las menores estaba siendo atendida por los Servicios Sociales municipales de Sallent y que, incluso, recibían ayuda psicológica. La responsable de Transformación Educativa ha recordado, no obstante, que el acoso escolar es «multifactorial» y que no solo se da en el ámbito del centro educativo, sino en otros escenarios como los virtuales. Por ello ha subrayado que los teléfonos móviles son «una de las armas que genera mayor preocupación entre los expertos», según ha recogido El Nacional.