La falta de conocimiento que tienen los jóvenes españoles sobre el terrorismo de ETA y sus víctimas ha llevado a la estudiante de arquitectura Adela Arteta a poner en marcha un nuevo proyecto con el fin de acabar con esta situación. Hija del documentalista Iñaki Arteta, ha aprovechado la influencia de las redes sociales para, a través de estas, «concienciar» sobre la realidad del terrorismo etarra y su coste para los españoles.
La idea surge del documental de Iñaki Arteta Sin libertad, 20 años después, segunda parte de la película ya estrenada en 2001. En este segundo documental, Arteta padre enfrenta a jóvenes que desconocen la realidad de ETA a las víctimas de la banda terrorista que protagonizaron el primer documental. Y ahora Adela Arteta, con esos mismos jóvenes, sale a la calle para conocer qué grado de conocimiento existe en esa franja de edad sobre el terrorismo vasco. «Mi objetivo», ha asegurado en declaraciones a elliberal.cat, «es mostrar que los jóvenes no saben nada sobre el tema y conocer el por qué, las causas de esto».
De momento, una de las protagonistas del documental ya ha salido a las calles de Barcelona a entrevistar a otros jóvenes para ver su grado de conocimiento sobre ETA y conocer su opinión. Las siguientes ciudades en las que se llevará a cabo esta experiencia serán Madrid y Bilbao. «Se trata de ver cómo difieren las cosas», según el lugar en el que se realicen las entrevistas, ha añadido Adela Arteta. Y, una vez que estén hechas todas las entrevistas, la autora del proyecto buscará la forma de que sean mostradas en centros educativos e instituciones. Mientras tanto, su difusión se realizará a través de redes como TikTok, que tiene una especial influencia en los jóvenes.
Arteta tiene claro que los jóvenes españoles «no tienen ni idea sobre el tema» del terrorismo vasco. Algo que considera «muy grave» y en cuya solución se debe «trabajar». Y es que son estos mismos jóvenes los que afirman que deberían haber recibido información sobre este pasado inmediato «tanto en casa como en el colegio». «La mayoría de los jóvenes no saben apenas del tema», ha asegurado, «tienen ideas cruzadas. Pero todos coinciden en que es algo que no les han enseñado en el colegio pero que se debería enseñar. Esto es esperanzador».