Con la derogación del delito de sedición y la reforma del de malversación, aprobados este jueves definitivamente en el Senado, el Gobierno del socialista Pedro Sánchez da ya por enterrada la mesa de diálogo pactada con ERC y que se ha reunido solo en tres ocasiones desde enero de 2020. Sánchez aleja de este modo, y al menos de momento, una negociación sobre la posible celebración de un referéndum de independencia en Cataluña. Según recogen diversos medios, el Gobierno considera que el diálogo acordado con ERC «ya se ha consumado» y por ello no se prevé un nuevo encuentro de los representantes del Ejecutivo y del Govern hasta, como mínimo, el final del verano de 2023.
Ya días atrás el presidente dejó claro que «el procés ha acabado» y, posteriormente, fue la ministra portavoz, Raquel Rodríguez, la que indicó que no habrá ningún referéndum en Cataluña. Rodríguez aseguró en este sentido que «es inconstitucional» e insistió en que «no se va a celebrar en este país porque lo prohíbe la Constitución«.
Sin embargo, los principales partidos de la oposición nacional entienden precisamente todo lo contrario. Y así lo han dejado claro este jueves en el pleno del Senado. El portavoz del PP en la Cámara alta, Javier Maroto, ha insistido en que Pedro Sánchez sí cumplirá la petición de ERC sobre esta cuestión y que por este motivo pretende colocar al magistrado Cándido Conde-Pumpido al frente del Tribunal Constitucional. De ser así, ha asegurado Maroto, Sánchez tendría vía libre para pactar con los republicanos catalanes la celebración de una consulta de autodeterminación.
¿HASTA CUÁNDO , PEDRO SÁNCHEZ, VAS A SEGUIR ABUSANDO DE NUESTRA PACIENCIA?¿QUÉ TE HABRÁ PROMETIDO SOROS , SÁNCHEZ?
«ROMA NO PAGA A TRAIDORES».