El presidente de Aragón, Javier Lambán, es junto a Emiliano García-Page, una de las voces más críticas con las alianzas de Pedro Sánchez con el populismo de Podemos, el separatismo de Esquerra Republicana de Cataluña o el brazo político de la extinta ETA, representado por Bildu. Ayer, durante las jornadas Aragón y la España territorial: una hoja de ruta para el futuro inmediato, dio un paso más en la estrategia de desmarque —tal vez pensando en las autonómicas de 2021— señalando que «mejor le hubiera ido a este país» si Javier Fernández, expresidente asturiano y presente en la sala, hubiera aceptado la secretaria general del PSOE en vez de Pedro Sánchez.
Y es que, lejos del discurso oficial del Gobierno sobre Cataluña, que asegura que la situación ha mejorado notablemente gracias al «diálogo» con el separatismo, Lambán sostuvo que «se habla de reconducir la situación de Cataluña, pero no se está solucionando». «Los independentistas», prosiguió, «están más tranquilos porque su hoja de ruta se va poco a poco realizando. Y cuando se habla de desconexión, es un problema que arrancó a raíz de que los partidos mayoritarios dejaron de tener la mayoría en el Congreso y se sucedieron las cesiones a los nacionalistas, una progresiva desconexión que se hubiera evitado con acuerdos entre PSOE y PP o con un partido, Ciudadanos, al que deseo de verdad que recupere presencia».
