Junts, el partido fundado por Carles Puigdemont con el objetivo de aunar a todo el independentismo catalán, vive en su seno nuevas tensiones tras conocerse el informe elaborado por la abogada Magda Oranich sobre el comportamiento del diputado Francesc de Dalmases hacia la subdirectora del programa FAQs de TV3. Un informe que no deja a Dalmases en buen lugar y que, según ha confesado la propia Oranich, intentó frenar la presidenta de la formación, Laura Borràs.
Borràs lidera dentro de Junts a la corriente más radical de la derecha separatista catalana. Frente a ella se sitúa un aparentemente moderado Jordi Turull, que, desde la secretaría general de la formación, ha tenido que bregar en poco tiempo con dos crisis de calado. La primera fue la relativa al cese por parte de Pere Aragonés del entonces vicepresidente del Govern, Jordi Puigneró, por pérdida de confianza. Este hecho tuvo como consecuencia la convocatoria por parte de Junts de una consulta a sus bases para decidir si debía o no permanecer en el Govern. Turull anunció entonces que los líderes de la formación no harían campaña por ninguna de las dos posibilidades. Un compromiso que no tardó en incumplir el sector de Laura Borràs. El resultado, ya es conocido: la militancia decidió de forma mayoritaria decir adiós al Govern y, desde entonces, la formación de Puigdemont atraviesa un desierto sin el asidero de la tupida red de medios de comunicación independentistas.
Presiones de Borràs
La nueva crisis ha llegado de la mano de Francesc de Dalmases y, de nuevo, de la propia Borràs. El primero insultó gravemente a la subdirectora del FAQs por no respetar el acuerdo al que habían llegado sobre las preguntas que se le formularían en el programa a la entonces aún presidenta del Parlament, Laura Borràs. Esta, por su parte, habría presionado a la responsable de realizar un informe interno sobre el comportamiento de Dalmases con el fin de que el documento fuera lo menos perjudicial posible para el todavía diputado.
La crisis vuelve a apoderarse de la posconvergencia. En esta ocasión, los responsables del partido intentarán que las aguas vuelvan a su cauce este martes, cuando se celebre una ejecutiva extraordinaria para abordar el problema creado por Dalmases y Borràs. Algunos integrantes de esta ejecutiva, según recogen medios independentistas como El Nacional, ya habrían solicitado la destitución del diputado de todos sus cargos.