¿Pretendía Torra utilizar a los CDR para provocar un conflicto civil?

Esta pregunta tiene, para la Guardia Civil, una clara respuesta. Los seguimientos realizados por el Instituto Armado dentro de una de las causas judiciales abiertas contra el procés concluyen que el entonces presidente de la Generalitat y «vicario» de Carles Puigdemont mantuvo varios encuentros en 2018 con los llamados Comités de Defensa Revolucionaria (CDR). El objetivo de los mismos sería dar a los radicales «directrices y órdenes» para que llevaran a cabo «acciones que claramente se infieren como subversivas y criminales«.

Así lo recogen las diligencias secretas 104/2017 publicadas por El Mon. En uno de los informes de la Guardia Civil se indica que Torra se había reunido en tres ocasiones con los CDR en 2018. En concreto, lo hizo el 9 y el 15 de agosto y el 28 de septiembre. En estos encuentros, según relata el digital, queda claro para la Guardia Civil que los CDR no son un grupo de separatistas que funcionan de forma autónoma, sino que el objetivo era convertirlos en una «milicia irregular«, que funcionaría bajo la autoridad de Torra como presidente y que deberían actuar para «provocar un conflicto civil de tal envergadura que desemboque en la independencia de Cataluña».

El «apreteu» del presidente a los CDR

Los investigadores consideraban como prueba de esta estrategia las palabras pronunciadas por Torra en Santa Coloma de Farners el 16 de septiembre de aquel año, animando en público a los CDR con el ya conocido «apreteu». En el mismo discurso, recuerdan los agentes en su conclusión de la investigación, el presidente pidió a los catalanes «encender pacíficamente, democráticamente, no violentamente» Cataluña porque, dijo, no podían «renunciar a la libertad».

Los autores de esta investigación, según El Mon, consideran que Torra pretendía fijar un «día D» para restaurar la declaración de independencia de octubre de 2017 y «controlar el territorio». Su objetivo habría sido «montar un cirio» y, además, poner a los Mossos al servicio del separatismo en el conflicto. Añaden que, además, el entonces presidente mantendría un doble discurso. Por un lado, el de la búsqueda de la ruptura con España de forma pacífica pero, por otro, el de movilizar a los CDR para que ejercieran la violencia. La conclusión final de los investigadores es que Quim Torra instaba a los radicales a «realizar acciones contundentes de manera que, a pesar de que se produjera alguna situación violenta que pudiera ser punible, él quedaría libre públicamente de toda responsabilidad».