La Assemblea Nacional Catalana (ANC) no ha tardado en responder al presidente del Govern, el republicano Pere Aragonés, tras conocer que no participará en la manifestación separatista del próximo 11 de septiembre. Lo ha hecho a través de un comunicado en el que recrimina al republicano preferir «hacerse foto con el Gobierno de Madrid» y no «con los centenares de miles de catalanes y catalanas que exigen la independencia». Una exigencia que, ha recordado la ANC, también defiende ERC «en su programa electoral».
La entidad presidida por Dolors Feliu asegura que la manifestación no se ha convocado «contra ninguno», a pesar de que en las últimas semanas han dejado claro que están en contra del separatismo oficial. En este sentido, la ANC ha señalado que está «en contra del autonomismo«, que es lo que formaciones como Junts y el separatismo más extremo recriminan a Aragonés y a ERC desde el inicio de la actual legislatura.
Manifestación «pacífica y democrática»
La ANC considera también que «ha de ser una exigencia y una normalidad democrática que los ciudadanos y sus representantes se encuentren en las calles». Y han señalado que la manifestación «se plantea reivindicativa pero pacífica y democrática». Y es que uno de los temores de ERC es precisamente que la protesta no tenga ese carácter pacífico. Ya en la edición de 2021 los republicanos fueron fuertemente abucheados por los separatistas radicales. Algo que es más que previsible que suceda este año, tras el rechazo de ERC a mantener a la posconvergente Laura Borràs al frente del Parlament tras abrirse juicio oral en su contra por su presunta implicación en un caso de corrupción.
En su comunicado, la ANC subraya que la protesta es «contra la estrategia de los partidos» separatistas. Y recrimina a estas formaciones que «si el movimiento independentista ha avanzado estos años, ha sido gracias a la no rendición y la lucha continuada». Y aunque la entidad inicia su comunicado señalando que el 11-S no se ha convocado contra los partidos separatistas, sí concluye su escrito indicando todo lo contrario: «Seremos los ciudadanos los que haremos la independencia. Pasando por delante de políticos y partidos. Invitándolos a sumar pero desde un liderazgo que recae en el conjunto del pueblo y que sabrá encontrar los caminos y las alternativas necesarias para hacer efectiva la independencia».