El Gobierno municipal de Vilanova i la Geltrú ha dejado en la calle a 16 empleados de la limpieza que hasta hace poco formaban parte de la plantilla de Valoriza, empresa que ha sido adjudicataria del servicio de limpieza de la ciudad. Un acuerdo de pleno de septiembre de 2021, con el apoyo de los grupos del Gobierno, ERC, Capgirem CUP y Junts, aprobó internalizar el servicio de limpieza viaria y de ellas playas del municipio con el argumento de que esta operación haría ganar eficacia al servicio y resultaría más barata para los ciudadanos.
Una vez oficializada la internalización, aparte de la no subrogación de estas 16 personas, lo que ha provocado su despido, también se aprobó una congelación salarial durante próximos ocho años. Los cuatro sindicatos representados en el comité de empresa de Valoriza han convocado una huelga indefinida desde este martes en protesta por la situación y con el apoyo del PSC y de Som VNG.
PSC y Som VNG, con los trabajadores
Para el PSC, «la internalización consigue que 16 personas, hasta ahora en el servicio, se queden en paro y el personal que sí se subroga pierda derechos laborales y sociales que hasta ahora tenían reconocidos en el convenio actual». Los socialistas también han señalado que «un 22% menos de personal en uno de los servicios más importantes de la ciudad no es precisamente garantía de calidad y cuando Vilanova i la Geltrú está más sucia y abandonada que nunca». Som VNG también ha destacado que «estas 16 personas se quedan en la calle y sin derecho a paro, incumpliendo lo que se les había prometido».
El gobierno de Vilanova prometió inicialmente que ninguno perdería el trabajo ni vería afectadas sus condiciones laborales pero la realidad es que de las 73 personas que prestaban el servicio en Valoriza se ha pasado a las 57 que ha aceptado el Ayuntamiento.
Otra de las situaciones que ha sorprendido a los sindicatos ha sido que la empresa pública Compañía de Aguas será la que ahora asumirá la limpieza viaria y de las playas y la que ha obligado a los despidos y la congelación salarial. Los sindicatos mayoritarios CCOO y UGT acusan al Gobierno municipal de aplicar políticas neoliberales bajo la apariencia de la remunicipalización de servicios. Además, también se quejan de la falta de diálogo de la alcaldesa, así como de la existencia de amenazas y provocaciones constantes contra los derechos y las condiciones laborales de los trabajadores de las empresas externas que prestan servicio en Vilanova.
Dos servicios públicos más han sido internalizados, jardinería y recogida de basuras, con resultados también negativos para sus trabajadores, como por ejemplo la jornada laboral de 35 horas. Sobre este hecho, el PSC ha manifestado que «el proceso de internalización de los tres contratos de los servicios más importantes de la ciudad, el de limpieza viaria, recogida de basuras y jardinería, han sido un fracaso con mayúsculas».