Nuevo episodio de intransigencia lingüística protagonizada por el separatismo. Tal y como ha denunciado en redes la diputada de Ciudadanos, Anna Grau, la diputada de la CUP Laia Estrada se negó ayer a dirigirse en castellano a un enfermo de esclerosis lateral amiotrófica (ELA) que no entendía el catalán. Diversos afectados por esta enfermedad se encontraban en la cámara catalana para narrar las enormes complicaciones que se encuentran en su vida cotidiana. Tal y como se aprecia en el vídeo, la esposa de uno de los enfermos, Yolanda Díaz, pidió a la diputada si podía expresarse en castellano porque su marido no comprendía el catalán. Sin embargo, Estrada se negó en redondo, prosiguiendo con su intervención en catalán pero ofreciéndose a repetir alguna palabra por si éste no la entendía.
Posteriormente, Grau lamentó in situ lo ocurrido: «Debo decir que lamento mucho que aquí se haya hablado de consenso de respeto, sensibilidad y empatía; y que tres diputadas no hayan atendido la petición de Yolanda Delgado de dirigirse en lengua castellana, que es lengua oficial de Cataluña». Y añadió: «Me ha parecido una falta de respeto, una declaración de intenciones y un mal indicio de cara al consenso».
La insensibilidad exhibida por la diputada radical no ha tardado en concitar diversas muestras de repulsa en las redes sociales por parte de voces constitucionalistas. La exdiputada de Ciudadanos y columnista de The Objective, Sonia Sierra, ha mostrado su rechazo de forma concisa pero rotunda: «Qué horror, de verdad». Igualmente breve ha sido la valoración efectuada por el analista José Javier Olivas, que, tras describir lo acontecido en la cámara, ha resumido: «Falta de empatía igual a psicopatía».