La entidad de jóvenes constitucionalistas S’ha Acabat es uno de los colectivos con los que el separatismo radical se ha ensañado más. Solo en el último medio año, la plataforma ha visto como centenares de radicales desmantelaban violentamente una carpa suya en la Universidad Autónoma de Barcelona, recibían múltiples amenazas de muerte a través de llamadas anónimas o eran rodeados y expulsados del campus de la Universidad Pompeu Fabra. El último episodio de este hostigamiento tuvo lugar ayer, cuando tres separatistas radicales rodearon e increparon en la calle al vicepresidente de la entidad Jordi Salvadó.
«Ayer tres gilipollas se me acercan por la espalda y me rodearon. Decían haberme reconocido por ser de S’ha Acabat», ha relatado Salvadó en su cuenta de Twitter. «Se me plantan en la cara y me amenazan. “Puto español”. Que deje de tocar los cojones», ha contado. Acto seguido, Salvadó ha querido mostrar su agradecimiento a los que le han brindado su apoyo: «Gracias porque me demostráis que vale la pena lo que hago. O veo pronto».
Tras darse a conocer dicho acoso, un colaborador de Catalunya Ràdio y militante de la CUP, Marcel Vivet, ha mostrado en redes su satisfacción por lo ocurrido: «De vez en cuando alguien le arruina la noche a estos payasos y me parece bien». Luego, tras responder Salvador que no le habían «arruinado» nada porque «hacen falta más de tres para darle un susto», Vivet ha zanjado la discusión con un insulto: «Españolista de mierda».
Por su parte, el diputado de Ciudadanos Nacho Martín Blanco ha expresado que «hay que estar cargado de odio para intentar amedrentar a alguien por su militancia en una asociación universitaria». «Son solo patanes totalitarios consentidos», ha agregado.
