Banco Santander revalida sus objetivos financieros para el año que viene pese a las dudas surgidas a raíz de la guerra en Ucrania. Así lo anunciarán hoy en la junta general de accionistas que se celebrará en la sede corporativa del grupo en Boadilla del Monte. «Nuestro modelo de negocio, y en especial nuestra diversificación, nos proporciona una base muy sólida para crecer. Esperamos mantener una alta rentabilidad en América y mejorar la rentabilidad en Europa. Como consecuencia de ello y basándonos en el consenso económico actual, confiamos en alcanzar los objetivos financieros de 2022 que anunciamos en febrero», está previsto que diga la presidenta Ana Botín, según una nota de la entidad.
Este modelo de gestión, tal y como señalará Botín, ha permitido al banco mantener sus objetivos: «En este primer trimestre de 2022, la actividad comercial se ha mantenido fuerte, con ingresos en línea con el último trimestre y un crecimiento interanual de la nueva producción de créditos estimado en el 8%, a niveles prepandemia». Del mismo modo, indicará que en este primer trimestre la eficiencia y el coste del crédito se mantuvieron en línea con lo previsto, el RoTE ordinario por encima del 13% y la ratio de capital CET1 fully loaded en el 12%.
La diversificación, una ventaja competitiva
Y es que, según la presidenta del Santander, «la diversificación demostró ser una ventaja competitiva durante la crisis financiera de 2008, durante la crisis de deuda soberana de 2011 y durante la pandemia, y explica por qué Santander siempre ha sido uno de los bancos más resilientes en los test de estrés». En este sentido, es destacable su beneficio por acción (BPA) ha sido «el menos volátil entre nuestros comparables en los últimos 20 años».
Que la incertidumbre de la guerra no afecte a las previsiones del banco se explica porque Santander no tiene presencia en Rusia ni Ucrania ni apenas exposición crediticia directa (80 millones de euros en total). Por otra parte, a entidad ha adoptado medidas para ayudar en la crisis humanitaria. «Ahora es el momento de ayudar. Estoy especialmente orgullosa del corredor humanitario que hemos organizado para el traslado de refugiados desde Polonia hasta España en colaboración con el gobierno español, que ha permitido a 180 personas llegar con seguridad a España, así como de la utilización del edificio del Solaruco, en nuestra sede de Boadilla del Monte, para alojar temporalmente a niños ucranianos con cáncer y sus familias», relatará Botín.