Los Mossos d’Esquadra detuvieron el pasado 20 de marzo a cinco hombres, de entre 27 y 52 años, como presuntos autores de un delito contra la salud pública durante un control de prevención de seguridad en la AP-7, dentro del término municipal de Vila-seca.
Durante el operativo, los agentes detectaron una furgoneta y un turismo que hacían maniobras extrañas ante la presencia policial. Al acercarse a la furgoneta para identificar al conductor, los agentes percibieron un fuerte olor a marihuana. En el cacheo del vehículo encontraron 16 sacos con ovillos de marihuana, documentación y un geolocalizador escondido bajo el asiento del conductor.
En el turismo, ocupado por cuatro personas, localizaron 9.900 euros en efectivo y cuatro teléfonos móviles. Además, en el interior del maletero hallaron tres armas simuladas, cuatro credenciales y brazaletes con la inscripción de la policía polaca, una bolsa con bridas, una navaja, un martillo y unos prismáticos.
Gracias a la investigación posterior, la policía determinó que la droga intervenida, de unos 100 kg de peso, podría alcanzar un valor aproximado en el mercado ilegal de casi medio millón de euros.
