El juzgado de lo Penal número 4 de Tarragona ha condenado a cinco años de inhabilitación al antiguo concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Calafell, Francisco Clavero, por anular casi 800 multas de tráfico a familiares y políticos durante el mandato 2011-2015.
La resolución, según ha publicado el propio ayuntamiento, que se había personado como parte perjudicada, atribuye a Clavero un delito de prevaricación continua. La sentencia es firme y definitiva, puesto que acusado reconoció los hechos y todas las partes personadas anunciaron en el juicio que no presentarían recurso.
Además de la pena de inhabilitación especial para puesto de trabajo o cargo público, el juzgado también condena a Clavero a indemnizar con 11.542,28 euros, más intereses, al Ayuntamiento de Calafell, por el perjuicio económico causado a las arcas municipales. También le impone las costas del procedimiento. Le tiene en cuenta el atenuante de reparación del daño, puesto que Clavero había depositado en el juzgado el importe que se le reclamaba.
Además de la pena de inhabilitación especial para puesto de trabajo o cargo público, deberá indemnizar con 11.542,28 euros, más intereses, al Ayuntamiento de Calafell, por el perjuicio económico causado a las arcas municipales.
Cerca de 800 multas
Durante el período 2011-2015, se anularon cerca de 800 multas, la inmensa mayoría de zona azul. Clavero “perdonó” la sanción a sus familiares directos y a las empresas donde éstos trabajaban. También a sí mismo, a otros concejales del equipo de gobierno de entonces y a sus familias y personas del entorno político.
El exconcejal había alegado que las multas retiradas se referían a vehículos particulares, puesto que prestaban una función oficial en el momento de ser denunciados. Además, ya en el acto de apertura de juicio oral se consideraba que las anulaciones no estaban motivadas, al no existir razón o motivo alguno de los previstos en la ley. Ahora, sin embargo, Clavero ha aceptado las acusaciones de prevaricación continuada y ha quedado condenado.