El primer secretario del PSC, Salvador Illa, ha acusado este sábado a la Generalitat de gobernar para la mitad de la población. Según el ex ministro de Sanidad, el Govern de Pere Aragonès actúa como una «camisa de fuerza que no permite que estas energías puedan liberarse y dar todo el potencial que tienen».
Según el ex ministro de Sanidad, el Govern de Pere Aragonès actúa como una «camisa de fuerza que no permite que estas energías puedan liberarse y dar todo el potencial que tienen».
Así lo ha dicho en una entrevista en el Podcast del PSC por el aniversario de las elecciones catalanas del 14 de febrero en la que ha lamentado la forma en que el bipartito ERC y Junts tomó las riendas de la Generalitat de Cataluña. Un equipo de gobierno «nacido con fórceps» que, a su entender, «excluye a la mitad de Cataluña». «La piedra fundacional del Govern para mí está mal colocada, y es una piedra que piensa en la mitad de Cataluña, y esto no puede acabar funcionando».
«La piedra fundacional del Govern para mí está mal colocada, y es una piedra que piensa en la mitad de Cataluña, y esto no puede acabar funcionando».
Salvador Illa
Un cambio de paradigma
Illa considera necesario «un giro» en Cataluña. Para el líder socialista, es fundamental que se imponga «un cambio de paradigma» que apueste por el diálogo entre catalanes. A su entender, la mesa de diálogo entre el Gobierno central y el de la Generalitat funciona pero «si no se complementa con un diálogo entre catalanes, el diálogo queda cojo».
Para llegar a ese entendimiento, ha insistido el socialista, Aragonès debe «liderar una mesa de partidos en Cataluña». Así, ha reafirmado el compromiso de su formación, que aboga por un proyecto dirigido para toda Cataluña. Así, ha explicado Illa que el PSC trasladará la reunión de su Ejecutiva del lunes a Banyoles (Gerona) donde la formación tiene «margen de mejora».
A favor del progreso
El líder socialista ha recordado los obstáculos que tanto el Govern como el Ayuntamiento de Barcelona ha ido poniendo para el progreso de Cataluña. Proyectos como el Aeropuerto de Barcelona, los Juegos Olímpicos de Invierno, el Hermitage, el Four Seasons, Nissan y los chinos o el complejo de ocio de Hard Rock, entre otros, evidencian la falta de interés por tender la mano al éxito del territorio.
En cuanto a la reforma laboral, ha acusado al PP de no haber tenido un mínimo de sentido de Estado en este asunto, y a ERC de haber fallado en un momento trascendental y de «jugar con la estabilidad política en España».