«Cómo será el tema para que hasta el Ara denuncie los mangoneos del Parlamento de Cataluña…». Este comentario publicado en Twitter por la exdiputada de Ciudadanos y columnista de The Objective Sonia Sierra da cuenta de la importancia de una noticia que lleva en portada hoy el diario nacionalista Ara: El Parlament paga 1,7 millones de euros al año a funcionarios que actualmente no trabajan en la cámara catalana. Según relata el rotativo, estos empleados cobran prácticamente el 100% del sueldo. Ello es debido a que están acogidos a un régimen especial llamado «licencia por edad» y que existe solo para funcionarios del parlamento catalán desde 2008.
Así, la mitad de los trabajadores que se encuentran en licencia por edad pertenecen al rango más alto (A1). Entre ellos, dos exletrados: Imma Folchi, que fue secretaria general entre 1999 y 2015,y Pere Sol, que desempeñó el mismo cargo entre 2015 y 2016, que cobran más de 10.000 euros mensuales. El resto de retribuciones oscilan entre los 4.000 euros mensuales de ujieres auxiliares o telefonistas y los 9.000 de los exjefes de departamento.
Desde 2008
La controvertida licencia por edad se introdujo en 2008, con el Parlament presidido por Ernest Benach (ERC) y por los vicepresidentes Ramon Cap (CiU) e Higini Clotas (PSC). Sus sucesores en el cargo no alteraron el reglamento. Sí lo ha hecho la actual Mesa del Parlament, presidida por Laura Borràs. No obstante, debido a un prórroga la licencia por edad sigue vigente para las 21 personas citadas así como para las que lo solicitaron el año pasado.