Si el ataque separatista a la carpa de los estudiantes constitucionalistas de S’ha Acabat del pasado 6 de octubre causó indignación, no menos está originando la pasiva respuesta de los rectores de la Universidad, que en un comunicado lamentaban la «tensión» vivida en el Campus pero se mostraban incapaces de distinguir entre víctimas y verdugos. Ahora, 1.700 profesores y académicos han puesto en conocimiento de la Comisión Europea la «tibieza» de la UAB, la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE) y del Ministerio de Universidades liderado por Manuel Castells.
«La Carta Magna Universitaria fundamenta la autonomía universitaria en la independencia de todo poder político, económico o religioso. Solo con máximo respeto a la libertad de expresión y debate de ideas construiremos un mundo mejor. Empecemos en los campus», señalaba el comunicado de la CRUE. Para el Foro de Profesores, autor de la iniciativa contra los rectores, el colectivo no distingue entre agresores y víctimas y recuerda que la Carta Magna, «suscrita por la mayoría de centros españoles, incluida la UAB, también proclama que cada universidad debe garantizar a los estudiantes la salvaguarda de las libertades».
«Déficits democráticos»
Ante estos hechos, piden a la Comisión Europea que tome nota de los «déficits democráticos» que se aprecian en la Universidades que toleran la violencia contra los discrepantes. Asimismo, piden al Ministerio de Universidades y a las autoridades catalanes que tomen las medidas necesarias para garantizar el libre ejercicio de los derechos fundamentales en los campus de las universidades del país. Entre los firmantes figuran intelectuales conocidos como Félix Ovejero, Fernando Savater o Gabriel Tortella. También se le han sumado algunos políticos como Inés Arrimadas o Cayetana Álvarez de Toledo.