La huelga de maquinistas de Rodalies ha generado este jueves el caos total en el transporte ferroviario de cercanías en Cataluña. Estaciones abarrotadas de usuarios y esperas de largas horas han sido la tónica de una jornada en la que Renfe ha justificado lo sucedido apelando a que muchos de los maquinistas no han acudido a sus puestos de trabajo por lo que ha sido imposible cumplir con los servicios mínimos pactados con los sindicatos.
La huelga ha afectado a un 47% «del servicio previsto» para esta jornada, según ha informado la Generalitat en un comunicado en el que también ha indicado que el parón ha obligado a cancelar la circulación de 81 trenes. En el mismo comunicado, la Generalitat, citando a Renfe, reconoce que lo sucedido «ha afectado gravemente a la movilidad» de los usuarios.
«Los retrasos y la disminución de frecuencias, a causa del incumplimiento de los servicios mínimos anunciados y comunicados a los maquinistas con antelación, han provocado aglomeraciones de usuarios en algunos andenes y estaciones», ha informado también la Generalitat. Por este motivo, Renfe ha decidido cerrar estaciones como la de Terrassa Este.
Actitud intolerable
La compañía considera «intolerable» la actitud de los maquinistas y ha anunciado que tomará medida contra los que tenían que haber ido a trabajar y no lo han hecho. «Se trata de un acto deliberado», ha indicado Renfe. Y ha recordado que, debido a esta situación, ha reforzado a lo largo del día la comunicación con los usuarios para intentar apaciguar los ánimos. Las redes sociales se han convertido en el principal canal de comunicación entre Renfe y quienes utilizan habitualmente este servicio en Cataluña. Y, como era de esperar, los mensajes han mostrado el grado de hartazgo de los usuarios un servicio que cada vez funciona peor en esta comunidad autónoma.