No es la primera vez que sale a la luz cómo los líderes del procés admiten en privado que el proyecto separatista no tiene ningún futuro. Uno de los casos más escandalosos fue el de la exconsellera Clara Ponsatí, quien llegó a afirmar que iban «de farol» tanto con el referéndum ilegal del 1-O como con la posterior y efímera declaración de independencia. Otro que también levantó ampollas fue el del republicano Josep Lluís Salvadó, que poco antes del referéndum reconocía que no tenían realmente nada preparado para declarar la independencia un día después del referéndum.
No son, sin embargo, los únicos. Ahora han salido a la luz conversaciones entre el abogado de Carles Puigdemont, Gonzalo Boye, y el secretario personal del expresidente, Josep Lluís Alay, que confirman esta idea. Y añaden, además, una nueva evidencia de cómo existe una total falta de unidad dentro del independentismo sobre qué camino tomar.
Según ha publicado El Confidencial este jueves, Boye y Alay se comunicaban a través de la aplicación Signal, un sistema de mensajería más seguro que Whatsapp y que suelen utilizar los separatistas desde octubre de 2019, cuando se publicó la sentencia del Tribunal Supremo contra los líderes del procés. En estas conversaciones, que forman parte del sumario del caso Voloh, investigado por el juez Joaquín Aguirre, Boye y Alay intentan ver de qué manera pueden forzar a la UE a reconocer una hipotética independencia de Cataluña.
Sin la ‘bendición’ de ERC y CUP
La conversación se produjo en octubre de 2020 y, según El Confidencial, Boye tenía claro que la UE solo aceptaría la separación si los catalanes fueran «una minoría nacional» víctima de «una flagrante vulneración de derechos». Algo que es evidente que no se puede aplicar al separatismo, que lleva gobernando esta comunidad autónoma desde 2011 ininterrumpidamente.
En la misma charla, Alay trasladaba al abogado que esta utilización del concepto de «minoría nacional» era cuestionada tanto por ERC como por la CUP. Algo a lo que Boye respondía que «no han entendido nada de nada». Y añadía: «Si no es por esa vía en la UE no hay cabida al resto. Es que la autodeterminación solo es posible en Europa si va enmarcada en el contexto de una flagrante vulneración de los derechos de una minoría nacional».
La monarquía bananera del expresidente
La noticia de El Confidencial ha sido criticada por abogadas como Isabel Elbal Sánchez, que ha recriminado al digital la publicación de esta conversación privada recordando que existe «el derecho fundamental al secreto de las comunicaciones«. También lo ha hecho el fugado Carles Puigdemont, quien estas semanas no pierde la ocasión de opinar sobre cualquier cuestión en sus redes digitales. «España es una monarquía bananera», ha publicado el expresidente en su cuenta de Twitter, «los derechos fundamentales son pisoteados con impunidad y complicidad judicial si se trata de combatir el independentismo».
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Otto Von Bismarck : «España es el pais más fuerte del mundo: los españoles llevan siglos intentado destruirlo y no lo han conseguido».
CUIDATE DE ETARRAS Y FACINEROSOS Y FACINEROSAS COMO RAHOLA PORQUE TE ESTÁN UTILIZANDO, PUIGDEMONT.
NO TIENEN LEGALIDAD NI LEGITIMIDAD Y LO QUE DICE LA U.E .ES NORMAL NADADIE PUEDE HACER LO QUE LE VENGA EN GANA.
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«LEX, DURA LEX SED LEX.»