Tras el trágico atentado islamista en las Ramblas de Barcelona en 2017, que se saldó con 16 muertos y más de un centenar de heridos, el separatismo no tardó en culpar de lo ocurrido, por acción u omisión, a España. En primer lugar, los manifestantes separatistas instrumentalizaron la marcha colectiva de repulsa a los crímenes enarbolando esteladas y acusando a la monarquía española de ser responsable indirectamente de los asesinatos por haber vendido armas a Arabia Saudí —un régimen complaciente con el terrorismo islamista. Luego, medios como Vilaweb, ARA o El Nacional, así como TV3, hicieron circular la teoría de que el CNI estaba al corriente de los ataques, y que los permitió o incluso promovió.
Pues bien, al cumplirse el quinto aniversario de los atentados, una figura de la envergadura de Laura Borràs —actual presidenta del Parlament— ha vuelto a la carga alimentado dicha teoría de la conspiración. Hoy mismo, ha publicado en Twitter lo siguiente: «Ayer recordábamos el dolor todavía vigente de los atentados del 17A, que todavía está empañado por los que no nos dejan saber qué pasó».
«Demostramos que podíamos ser un Estado»
En la misma línea, el día anterior Borràs criticó en esta red social que las víctimas han «vivido un juicio que no les ha permitido saber, descubrir, comprender el porqué de una locura que les ha arrebatado personas queridas». «Hicimos comisiones de investigación en el Parlament y peticiones al Congreso, rechazadas. Demasiada oscuridad, aún. Y esta negativa de aclarar lo que pasó, que al menos permitiese que no volviese a suceder…», denunció. Finalmente, Borràs aprovechó la ocasión para lanzar un alegato separatista: «Aquel día después de los atentados demostramos que podíamos ser un Estado. Que lo podemos ser. Que lo seremos».