Tal día como hoy hace dos años Isabel Diaz Ayuso era elegida Presidenta de la CAM con el apoyo de Ciudadanos y con la abstención de Vox. Sabíamos que no se lo iban a poner fácil a la Presidenta de la Comunidad de Madrid pero sin embargo, me atrevo a decir que nadie se esperaba que fuera a sufrir un linchamiento tan constante de la izquierda e incluso de sus propios socios de gobierno. Pero como dice la popular expresión, de aquellos polvos estos lodos, dos años después les ha pasado factura: los socios de gobierno son inexistentes en la CAM y van camino de la extinción también en el resto de España.
Además, la Presidenta ha conseguido un liderazgo del centro derecha frente a la izquierda en Madrid que nadie cuestiona. Han sido años muy complicados, con una pandemia de por medio, ocasionando una gran crisis sanitaria y económica que sin embargo, desde Madrid se ha sabido capear con nota.
Han sido años muy complicados, con una pandemia de por medio, ocasionando una gran crisis sanitaria y económica que sin embargo, desde Madrid se ha sabido capear con nota
El éxito de Isabel Díaz Ayuso durante estos años ha estado en saber rodearse de los mejores. Gracias a Enrique López, Javier Fernández-Lasquetty o Enrique Ruiz Escudero, el artífice de la gran gestión sanitaria, entre otros, la Comunidad de Madrid se ha convertido en el eje principal de las políticas liberales de bajada de impuestos que encarna el Partido Popular y sobre todo, del buen gobierno y de la mejor gestión.
Pese a la campaña de desprestigio, de acoso y derribo, la Presidenta no solo se ha ganado el cariño de los madrileños, sino que además se ha reflejado en un resultado en las urnas excepcional el pasado mes de mayo
A la izquierda parece que se le van acabando los argumentos contra Isabel Díaz Ayuso, porque pese a la campaña de desprestigio, de acoso y derribo, la Presidenta no solo se ha ganado el cariño de los madrileños, sino que además se ha reflejado en un resultado en las urnas excepcional el pasado mes de mayo. Y la izquierda, no lo soporta. Veremos cómo evoluciona la política madrileña durante estos próximos años aunque me aventuro a decir que viendo los acontecimientos acaecidos y viendo cómo está siendo este agosto abrasador, se avecinan meses políticamente muy calientes.