Los indultos son una mala noticia para el independentismo insurreccional. Después de tantos lamentos sobre la represión ejercida por el Estado español, ahora parece que, pensándolo bien, prefieren que sigan en la cárcel. Al menos eso es lo que están diciendo estos últimos días.
«Después de tantos lamentos sobre la represión ejercida por el Estado español, ahora parece que, pensándolo bien, prefieren que sigan en la cárcel»
Bien claro lo manifestaba Pilar Carracelas en el Món el 2 de junio: Con los indultos, España resuelve el conflicto político. Ni mucho menos, coincide todo el mundo que se mueva dentro de unos parámetros mínimamente racionales; ni mucho menos el conflicto acaba aquí, pero es un paso decidido en la vía del apaciguamiento. Al menos ésa es la intención. Más adelante, ya se verán los resultados. El infierno está lleno de buenas intenciones, dice un refrán catalán.
Para Carracelas, «estos indultos son una buena noticia para las familias de los presos y una mala noticia para el país». Siguiendo esta lógica, los parientes con sentido patriótico y espíritu de sacrificio deberían recibirles con un: Vuelve a tu celda, cariño.
«Estos indultos, a quien menos convienen es a los partidos procesistas» —¿porque se les acaba el argumento victimista?—, «los independentistas no habrán tenido que cumplir ni un tercio de su condena» —un tercio, todo hay que decirlo, con muchos días libres; un tercio que no les ha impedido mantener un notable protagonismo político y mediático—; en cambio, «nuestros antepasados pagaban un precio mucho más caro por hacer frente al sistema».
«Estos indultos, a quien menos convienen es a los partidos procesistas» —¿porque se les acaba el argumento victimista?»
Pilar Carracelas
Reconociendo implícitamente que España no es como Turquía ni la China, nuestra autora afirma que «hacer la independencia saldría ahora mucho más barato que cualquier intento anterior», se supone que en número de bajas. «Y no lo estamos aprovechando.»
«Hacer la independencia saldría ahora mucho más barato que cualquier intento anterior», se supone que en número de bajas. «Y no lo estamos aprovechando»
Pilar Carracelas
Los indultos, en definitiva, son «una farsa para disimular el paso a un nuevo orden político cada vez más autoritario, tanto en Cataluña como en España».
La cara amable de España
En Vilaweb, el pasado día 6, Jorge Cagiao, profesor de Derecho de la Universidad de Tours, manifestaba diáfanamente que los indultos no van bien al independentismo.
«No pueden ser favorables, porque muestran la cara amable de España. Y para el independentismo catalán no es positivo, porque de puertas afuera permiten mostrar que España es un estado decente, que comprende la situación y es capaz de ponerse en el lugar del rival político e indultarlo. Indultarlo a pesar de las penas larguísimas. No refuerzan el proyecto independentista.»
«No pueden ser favorables, porque muestran la cara amable de España. Y para el independentismo catalán no es positivo, porque de puertas afuera permiten mostrar que España es un estado decente»
Jorge Cagiao
A pesar del medio donde aparece la entrevista, Cagiao no comparte en absoluto la visión de las cosas que el independentismo ha impuesto en Cataluña, y éste es su pronóstico sobre el futuro inmediato:
«La inercia es muy desfavorable a poder salir de España. El estado español, con virtudes y defectos, por mucho que se diga que es un estado débil (algunos decían fallido) ha demostrado que no lo es. Es un estado sólido, capaz de reaccionar de forma dura. Y de encontrar comprensión y apoyo fuera de las fronteras. La inercia favorece que el estado conserve la unidad territorial. Ahora bien, los procesos tienen momentos ascendentes y descendentes. En este momento es muy difícil imaginar que en la década que hemos empezado pueda haber una evolución favorable al independentismo en Cataluña. Pero nunca no se sabe.»
«La inercia es muy desfavorable a poder salir de España. El estado español, con virtudes y defectos, por mucho que se diga que es un estado débil (algunos decían fallido) ha demostrado que no lo es»
Jorge Cagiao
También expone la visión académica de la cuestión: «La secesión sólo está justificada, y es legítima, cuando hay agravios importantes, como la colonización y la violación de derechos de las minorías. Y esto cuesta aplicarlo a contextos democráticos. Esta teoría dominante es difícilmente aplicable al caso catalán. El independentismo difícilmente puede argüir la causa justa para justificar la secesión legítima. Le faltan los agravios importantes. No hablamos de agravios en financiación únicamente (…) Cataluña y los catalanes ya tienen un grado de autonomía muy importante. No se pueden considerar no representados, o sin voz, en el sistema español. Tienen representantes en el Parlamento catalán y en el español. La negativa al referéndum no permite justificar la causa justa.»
«Cataluña y los catalanes ya tienen un grado de autonomía muy importante. No se pueden considerar no representados, o sin voz, en el sistema español. Tienen representantes en el Parlamento catalán y en el español. La negativa al referéndum no permite justificar la causa justa»
Jorge Cagiao
Una nueva ola represiva
Según Gonzalo Boye, abogado de Carles Puigdemont, en el Nacional el viernes 18 —D+1—, «el precio que se pagará individual y colectivamente será mucho más elevado que el previsto».
Como profesional y observador privilegiado de la situación, Boye puede manifestar su parecer, pero es inevitable preguntarse hasta qué punto está haciendo de portavoz de una opción política, la de su defendido.
«Sea cual sea el momento que termine eligiendo el gobierno central para conceder los indultos, sea cual sea la métrica penológica que estos contengan, sea cual sea la situación en que queden los presos una vez concedidos, lo cierto y verdad es que a partir del D+1 la reacción de los sectores más radicales del nacionalismo español consistirá en poner en marcha una dinámica perfectamente previsible y que se centrará en una nueva ola represiva sobre la cual el gobierno central no tiene ninguna capacidad de actuar… o casi ninguna.»
«Sectores radicales», «ola represiva», un gobierno sin «ninguna capacidad de actuar»… Parece que nos está contando una serie de ficción sobre un golpe de Estado, en algún lugar de Sudamérica, en los años 70.
Nos habla de un «nacionalismo español» que sigue al mando, de la reactivación de «causas adormiladas», y de «nuevos procedimientos sobre la base de supuestas investigaciones». Y nos anuncia que «se volverá a relacionar independentismo con terrorismo, con corrupción, con malversación, con criminalidad…»
Boye se pregunta si el independentismo «está dispuesto a enfrentar la nueva ola represiva que ya ha comenzado o, por el contrario, la idea es plegarse a la misma por si algún día pasa y la resaca que deje no sea tan apabullante como esperan algunos.»
«Se volverá a relacionar independentismo con terrorismo, con corrupción, con malversación, con criminalidad»
Pronto se advierte la coincidencia de su análisis con el del sector menos pragmático de JxCat. Reclama la «unidad del independentismo» y denuncia a los que no se plieguen a esa unidad dirigida, es de suponer, aunque no lo menciona, desde el «exilio republicano»: «Pensar, como no pocos hacen, que lo personal y que lo partidista es más relevante o urgente que lo colectivo es equivocarse de pleno y de plano, pero, sobre todo, es una forma de colaboracionismo con la represión.»
Insiste en que «la embestida de esta nueva ola represiva será tan brutal que sólo desde una postura de unidad se podrá resistir» y que urge que «lo colectivo se anteponga a lo individual».
¡A asumir sacrificios!
Sábado 19, en Vilaweb, Ot Bou Costa lanza una nueva filípica contra los indultos: Deixa-ho estar, fill meu, sigues espanyol.
Abandonad toda esperanza, esto es una rendición: «Para llegar a los indultos, la clase política ha tenido que guardar la independencia en el cajón; para guardarla ha tenido que blanquear la autonomía; para volver al autonomismo ha tenido que dejar a la gente huérfana, y para dejar a la gente huérfana la ha tenido que reprimir. Mientras algunos nos tachan de marcianos por defender las ideas que les llevaron a la cárcel, la gente está a merced de una justicia española enfurecida por los indultos, no sólo sin ninguna perspectiva de independencia sino con el conflicto ahogado y maquillado por sus propios dirigentes (…) España intentará arruinarnos o encarcelarnos o comprarnos o caparnos uno por uno.»
«Para llegar a los indultos, la clase política ha tenido que guardar la independencia en el cajón; para guardarla ha tenido que blanquear la autonomía; para volver al autonomismo ha tenido que dejar a la gente huérfana, y para dejar a la gente huérfana la ha tenido que reprimir»
Ot Bou Costa
Se supone que lo de caparnos es en sentido figurado. Aunque cuando dice que «los indultados saldrán de la cárcel mientras la gente entra», parece que lo dice en serio. ¿Se avecinan redadas masivas e indiscriminadas? «Decir que los indultos son una pequeña victoria para el independentismo es un insulto a todas las generaciones que vamos a pagar la factura.»
«El problema de la independencia es que se han de correr riesgos», nos dice, aunque no era eso lo que nos decían y no hace tanto tiempo como para que lo hayamos olvidado. Las voces inmensamente mayoritarias del independentismo nos convocaban a encuentros festivos, reivindicativos por supuesto, pero festivos, lúdicos, y con música en directo. No nos hablaban de riesgos, y por eso tuvieron tanto éxito.
El peligro que advierten ahora los independentistas insurreccionales es que la opinión mayoritaria entre los suyos crea que no hace falta asumir riesgos o que la independencia no es urgente. «Gracias al trabajo sucio de los partidos [independentistas], España dedicará los próximos años a convencernos de que asumir el sacrificio de ganar no vale la pena», pero «los arquitectos de la nueva Cataluña rendida tenéis que saber algo: No nos haréis españoles.»
El separatismo ha perdido el 30% (casi 1 de cada 3) de los votos que obtuvo en 2017: de 2.079.000 a 1.456.000, més de 623.000 catalans han dit adéu al prusés, la secesión ya no les ilusiona, no ven necesario movilizarse.Y JORDI C. (OMNIUM) Y PUIGDEMONT DICEN :» VICTORIA HISTORICA.»PERDER CASI 700 MIL VOTOS .
Os indultarán como hizo el Frente Popular con Lluis Companys, pero en Rusia o China ,estariais fusilados.