La carta publicada por el líder de ERC, Oriol Junqueras, el pasado domingo en Ara admitiendo no solo la necesidad de los indultos sino la imposibilidad de la vía unilateral ha supuesto un revulsivo para el procés que a punto está de convertir este en historia. Tanto es así que el secretario general de Junts, Jordi Sánchez, ha respondido con otro escrito este martes en el mismo diario asegurando que el Primero de Octubre de 2017 no tenía como finalidad la declaración unilateral de independencia sino «forzar al Gobierno español a abrir una vía de diálogo y negociación para llevar a cabo un referéndum acordado». Aquello que Clara Ponsatí llamó «ir de farol».
En su escrito, Sánchez acusa a Junqueras de «tutelar» al actual presidente autonómico, Pere Aragonés. Algo que también recrimina a este, que se negó firmemente a que fuera Carles Puigdemont el que gobernara Cataluña desde Waterloo, a través del Consell per la República y a pesar de no haber ganado las elecciones. Sánchez, sin embargo, deja claro que el acuerdo entre ERC y Junts para la actual legislatura seguirá en vigor y tendrá como eje la defensa de la amnistía y la autodeterminación ante el Estado a través de la mesa de diálogo. «Sin calendario aún, sin hoja de ruta precisa», ha añadido, «pero sin renuncias previas a ninguna estrategia cívica y pacífica«.
Sorpresa entre los ‘posconvergentes’
Las reacciones a este artículo de Sánchez no se han hecho esperar. Y es que la postura del secretario general de Junts ha sorprendido casi más a los suyos que los adversarios. Es el caso del expresidente Quim Torra, inhabilitado, además, por defender a los llamados «presos políticos» colocando sus símbolos en la Generalitat en periodo electoral. Torra ha recordado a Sánchez que votó «sí a constituir Cataluña en un estado independiente en forma de república» el 1 de octubre de 2017. «Ejercí el derecho de autodeterminación de Cataluña», ha añadido, «por eso para mí el 1-O es fundacional e innegociable».
También ha mostrado su rechazo a las palabras de Jordi Sánchez, quien está a la espera del indulto del Gobierno, el exvicepresidente del Parlament, Josep Costa, que ha asegurado que son «muchos más» los que creen que la independencia «es viable» y los que el 1 de octubre de 2017 asumieron «riesgos para hacerla posible».
Otros tuiteros independentistas anónimos han mostrado su pesar ante la postura del líder de Junts. Y es que no debe ser fácil asumir que quienes pusieron en marcha el procés contribuyan hoy a su desintegración, aunque sea por lograr la medida del perdón del Gobierno central y salir así de la cárcel.
El voto de Lérida vale casi 3 veces que en Santa Coloma de Gramanet. TENÉIS UN 26% DEL CENSO (UNA PERSONA UN VOTO)EN LAS «PLEBISCITARIAS» DEL 14-F.
El separatismo ha perdido el 30% (casi 1 de cada 3) de los votos que obtuvo en 2017: de 2.079.000 a 1.456.000, més de 623.000 catalans han dit adéu al prusés, la secesión ya no les ilusiona.