Como viene siendo habitual en el independentismo catalán, en cuanto la Justicia pone sus ojos sobre alguno de los líderes del procés, ellos activan la máquina de fango para desprestigiar al juez que tiene la obligación de investigar. La última víctima de este tipo de campañas es la jueza Carmen García Martínez, titular del Juzgado de Instrucción número 18 de Barcelona y que ha cometido la osadía de investigar al ex conseller de Exteriores, Raül Romeva, por un presunto delito de malversación de fondos públicos al dedicar dinero de su conselleria a la promoción internacional del procés.
Medios como El Nacional, el digital más subvencionado por la Generalitat separatista, exhiben hoy el currículum de la jueza como si de una lista de oprobios se tratara. «Es una vieja conocida por los movimientos sociales activistas de la capital catalana por su oscuro currículum», asegura el digital.
Recoge el medio dirigido por José Antich que García Martínez ha condenado a varios radicales por participar en protestas en Barcelona. Pero prestan especial atención a una campaña en Change.org contra la jueza a raíz de las protestas en la capital catalana por el desalojo de un casal okupa en el centro de la ciudad. Tema central del documental Ciutat Morta, las protestas se saldaron con un policía en coma, agredido por el entonces desconocido Rodrigo Lanza. La jueza García fue la instructora del caso que llevó a Lanza a permanecer dos años en prisión preventiva. Sin embargo, olvida mencionar El Nacional que, años más tarde, Rodrigo Lanza asesinó de una brutal paliza a Víctor Laínez por llevar unos tirantes con la bandera española en un bar de Zaragoza.
Toda la información que proviene del nacionalismo catalán esta sesgada en función de sus intereses, y eso cuando no es manifiestamente falsa o ha sido manipulada . Es una verguenza q a dia de hoy, y después de un intento de golpe de estado, todavía controlen las instituciones de la Generalitat y las utilicen en beneficio propio.