Mientras que los restauradores en Madrid han podido capear el temporal gracias a la flexibilidad mostrada por su gobierno autonómico, en Barcelona las severas restricciones anti-Covid han abocado al sector a una situación terminal. Al menos, es el mensaje que se desprende de un vídeo lanzado por el Gremi de restauració de Barcelona, en el que se denuncia que la crisis desatada en los restuarantes catalanes a consecuencia de la pandemia se ha llevado por delante 23.000 puestos de trabajo.
«Cataluña es una tierra de oportunidades para el emprendimiento. Un territorio que atrae inversión internacional. En Barcelona, la red de bares y restaurantes no solo genera riqueza y ocupación, sino que también configura el carácter de una ciudad abierta y cosmopolita», manifiesta una voz en off al principio de la cinta. Luego, recuerda que la relación calidad-precio de los establecimientos catalanes les sitúa en una posición de ventaja con respecto a sus competidores. «Pero, ¿realmente es así?», se pregunta la voz a continuación. Y responde: «Cataluña es la comunidad autónoma con más trabajadores en ERTE. Durante los últimos seis meses, sus bares y restaurantes han estado abiertos al público un total de 1350 horas, un 60% que la restauración en Madrid».
Seis meses con los restaurantes cerrados en centros comerciales
La consecuencia de ello, recuerdan, es que en Madrid han «aumentado los trabajadores del sector» mientras que en Cataluña «se han destruido 23.000 puestos de trabajo». Asimismo, subrayan que la comunidad catalana es la única región en la que los restaurantes de los centros comerciales llevan seis meses cerrados. Finalmente, tras recordar que «Barcelona sigue acumulando negocios dinamitados por las restricciones», el vídeo termina con una pregunta: «Cataluña, ¿principal motor económico de España?».