Ignacio (Nacho) Martin Blanco (Barcelona 1982) es periodista y diputado de Ciudadanos en el Parlament de Cataluña. Actualmente es portavoz del Grupo Parlamentario de Ciudadanos, responsable de Comunicación del partido en Cataluña y, sin duda, una de las figuras en alza dentro de su formación. Esta entrevista se desarrolla en el Parlament, en unos momentos de incertidumbre sobre el futuro de la legislatura y con su partido herido por los malos resultados de las elecciones autonómicas del pasado 14F.
¿Piensa que va a haber gobierno o que vamos a unas nuevas elecciones?
En Cataluña todo es muy imprevisible como ya sabes, pero, a pesar de las discrepancias, los nacionalistas cuando tienen el gobierno cerca acaban poniéndose de acuerdo. Sacan pecho de haber conseguido el 52% de los votos, que representa el 25% del censo electoral, y, a pesar de las tensiones y de que Junts quiere hacer pagar a ERC las presiones que en su momento hizo sobre ellos, al final, de una u otra forma, se pondrán de acuerdo. Lo que me preocupa de sus sus cuitas internas es su efecto negativo sobre el conjunto de la sociedad. El acuerdo de ERC y la CUP es un auténtico desastre para la economía. Subirá la presión fiscal, agravará la fuga de empresas y, en definitiva, profundizará en la decadencia de Cataluña. En cualquier caso, creo que, aunque Junts no entre en el gobierno, lo apoyará desde fuera, al menos inicialmente, aunque cualquier cosa puede pasar.
¿Ciudadanos da su apoyo a que Salvador Illa (PSC) se presente a la investidura aunque sea sin posibilidades de salir elegido?
En primer lugar, la decisión depende de Laura Borràs y el PSC no se ha puesto en contacto con nosotros sobre esta cuestión. Nosotros siempre hemos demostrado lealtad constitucional, algo que el PSC no ha hecho. En 2017 se hizo caballo de batalla de una supuesta negativa de Inés Arrimadas a presentarse a la investidura que no fue tal, sino simplemente que, con una mayoría separatista, el candidato propuesto por el presidente del Parlament fue otro. En cualquier caso, no será por Ciudadanos que no haya unidad constitucionalista en Cataluña.
Nuestro candidato no será nunca un separatista pero tampoco lo es Lucas Ferro. Calificar de constitucionalistas a los comunes es muy generoso
Nacho Martín Blanco
¿Qué posición adoptará Ciudadanos en la votación para elegir al sustituto/a de Jaume Alonso-Cuevillas en la secretaria segunda de la Mesa del Parlament?
Ciudadanos no va a participar en la alteración de los acuerdos de formación de la Mesa. Nuestro candidato/a no será nunca un separatista pero tampoco lo es Lucas Ferro (En Comú-Podem). Calificar de constitucionalistas a los comunes es demasiado generoso.
¿Es posible romper los bloques en que esta dividida la sociedad catalana? ¿Qué hay que hacer para que algún día veamos un gobierno constitucionalista en Cataluña?
Yo creo que el futuro no está escrito y que somos los ciudadanos quiénes lo hacemos con nuestro esfuerzo. El debate público en Cataluña esta maniatado por una hegemonía cultural del nacionalismo y, en esta cuestión, la responsabilidad del PSC ha sido inmensa, especialmente durante la etapa del Tripartito. Es perfectamente posible una respuesta desde la catalanidad al nacionalismo. Son perfectamente compatibles la catalanidad, la españolidad y la europeidad sin estridencias y combatir un nacionalismo que distorsiona la realidad y genera inestabilidad política e inseguridad jurídica. Esto es lo que debemos hacer ente todos, y especialmente los partidos, defendiendo una sociedad abierta, cosmopolita, innovadora, que vuelva a ser motor económico de España, exactamente lo contrario de lo que hace el nacionalismo. Hay que seguir dando la batalla cultural, de las ideas y creo que más allá de Ciudadanos nadie la ha dado.
Son perfectamente compatibles la catalanidad, la españolidad y la europeidad sin estridencias y combatir un nacionalismo que distorsiona la realidad
Nacho Martín Blanco
Los resultados electorales de PP y Ciudadanos han sido nefastos ¿A que lo atribuye?
Es evidente que el resultado que obtuvimos el 14-F fue un mal resultado. Hemos de hacer un proceso de introspección y analizar las causas que nos han llevado a ese mal resultado. Eso se está haciendo. Hay causas que son exógenas, como la baja participación, que afecta más al constitucionalismo que al nacionalismo, que tiene un voto más movilizado. Pero también está claro que no hemos sabido superar un debate maniqueo de o estás conmigo o estás contra mi, o eres catalán o eres español y, en este marco de polarización, es muy difícil hacer llegar propuestas transaccionales moderadas, que es en lo que está Ciudadanos.
El elemento principal de la división en bloques del voto de los catalanes es la lengua habitual. Verdad o no, la opinión pública identifica a Ciudadanos como el partido de los castellanohablantes, lo que refuerza la propaganda nacionalista de ser un partido ‘anticatalán’ ¿Romper esta muralla, lo que, en parte, se logró en 2017, no sería el paso previo necesario para revertir la situación en Cataluña?
Yo creo que, efectivamente, se ha usado la lengua para dividir. Pero yo aspiro a que Ciudadanos pueda satisfacer cada vez más las aspiraciones de muchos catalanes que no son independentistas, que no menosprecian lo español pero que tienen el catalán como su lengua habitual. Yo soy bilingüe en mi vida cotidiana, mis referentes culturales lo son tanto en catalán como en castellano. Pla o Gaziel en mi vertiente periodística, o Carles Riba o Espriu en poesía, y Mendoza y otros tantos en castellano. Es posible una sociedad catalana, plenamente catalana, sin menospreciar la españolidad, sin hispanofobia, sin la voluntad excluyente del nacionalismo.
Aspiro a que Cs pueda satisfacer cada vez más las aspiraciones de muchos catalanes que no son independentistas, no menosprecian lo español, pero tienen el catalán como lengua habitual
Nacho Martín Blanco
¿Es necesaria una reordenación del centro y centro derecha no independentista? ¿Cree que es posible una confluencia en el futuro que vaya del PP al denominado catalanismo no independentista pasando por Ciudadanos, como fórmula para tratar de romper los bloques identitarios y alcanzar una mayoría parlamentaria, pactando con el PSC, que sea una alternativa de gobierno al independentismo?
Yo espero que no haya repetición electoral pero, si la hubiera, defenderemos una confluencia con el PP que no fue posible el 14-F por la negativa de los populares. Pero coincido que pacificar la cuestión lingüística es esencial para romper los bloques. La dificultad es que el nacionalismo ha establecido unos dogmas que hay que deshacer y eso sólo puede hacerse con un debate racional que el nacionalismo impide a toda costa. Yo quiero una sociedad en la que mis hijos tengan una educación trilingüe y no una sociedad monolingüe y el PSC no ha contribuido a ello
Pero habrá de reconocer que Illa ha cambiado el discurso.
Hasta cierto punto. El movimiento se demuestra andando y, de momento, el PSC sigue manteniendo su apoyo sin fisuras a la inmersión lingüística. Yo respeto a Illa por su talante dialogante en momentos complicados de la pandemia, respetando a sus adversarios políticos, pero vamos a ver si su postura personal hace cambiar la posición del PSC, que hasta la fecha ha distado mucho de ser loable y, cuando ha gobernado, se ha parecido mucho a la de los nacionalistas.
Necesitamos una catalanidad inclusiva que no excluya al castellano y su cultura, que no los considere una parte ajena a la catalanidad
Nacho Martín Blanco
Es cierto lo que dice pero a veces parece que algunos se sienten cómodos ocupando el rincón del cuadrilátero en que el nacionalismo quiere verlos encerrados. Sin capacidad de ser alternativa no hay solución para Cataluña y para ello hay que hacer el esfuerzo intelectual y político de buscar acuerdos, de superar diferencias. No vale con dirigirse sólo a los fieles, con eso no se cambian las mayorías.
Efectivamente necesitamos construir una catalanidad inclusiva que no excluya al castellano y su cultura. Que no los considere una parte ajena a la catalanidad. De hecho, hablando con amigos y familiares que se declaran independentistas, acabas viendo que hay muchas más cosas que nos unen que no que nos separan. Aquí las diferencias son ficticias. El catalán y castellano son lenguas muy parecidas, no hay diferencias religiosas ni raciales, ni diferencias de tradición jurídica, como ocurre por ejemplo en Canadá.
Volviendo a Ciudadanos, ¿existe idea de alguna reforma interna que favorezca la participación de su militancia o de recuperar a los críticos que se han quedado en el partido o que se fueron en la época de Rivera y que, ahora, estarían de acuerdo con un partido bisagra que pueda pactar con PP o PSOE en función de los casos pero sin posiciones apriorísticas?
Yo creo que en España hay un espacio de centro liberal y ese es el espacio de Ciudadanos. Inés Arrimadas lleva un año como presidenta del partido y ha demostrado sobradamente esta opción por la responsabilidad y centralidad apoyando los estados de alarma, entre otros muchos ejemplos. Eso se traduce en nuestra voluntad de ser útiles, a pesar de la apuesta por la polarización y los maximalismos de otros partidos. Respecto al sector crítico, hace un año hubo un congreso y sus resultados fueron muy reducidos. Es verdad que nadie sobra pero, si alguien quiere un partido estrictamente de derechas o de izquierdas, es normal que no se sienta cómodo en un partido de centro.
Nadie sobra pero, si alguien quiere un partido estrictamente de derechas o de izquierdas es normal que no se sienta cómodo en un partido de centro
Nacho Martín Blanco
¿El giro estratégico de Ciudadanos va a tener repercusión en la política de acuerdos municipales en Cataluña donde se abren posibilidades de pactos con el PSC en especial si continua en la oposición en Cataluña?
El PSC hasta ahora ha tenido una clara voluntad de pactar con ERC, Junts o los comunes. Ciudadanos está siempre abierto a alternativas constitucionales y las próximas municipales pueden ser un buen momento para que estas alternativas se hagan realidad. Mientras tanto, si surgen posibilidades, se analizarán con una voluntad de avanzar en pactos constitucionalistas.
Una última pregunta: ¿sobrevivirá Ciudadanos si se queda fuera de la Asamblea de Madrid?
No me cabe duda. El espacio de centro existe en España y Ciudadanos va a representarlo al margen de resultados coyunturales.
