Mientras Mediapro pide un rescate de 300 millones de euros a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), su administrador único, el empresario catalán Jaume Roures, ha sido el que ha facilitado a Joan Laporta acceder a la presidencia del Barça mediante un aval de nada menos que 30 millones de euros. A esta contradicción se une, sin embargo, un hecho, cuando menos, sorprendente: Mediapro es la titular de los derechos de emisión de los partidos de La Liga, en la que compite el Barça y, además, es la que proporciona las imágenes al VAR. De ahí que muchos se hayan echado las manos a la cabeza al conocer cómo Roures se ha posicionado claramente a favor del Barça y su flamante presidente.
El otro avalista de Laporta ha sido el empresario José Elías, de Audax. Entre él y el vicepresidente de la compañía, Eduard Romeu, han aportado un aval de 70 millones de euros. Ambos han colaborado estrechamente con Laporta en los últimos meses, según el diario deportivo Sport. Elías no podrá formar parte de la junta directiva de Laporta porque no tiene la antigüedad necesaria como socio. Romeu, por su parte, ha renunciado a tener un cargo como tal pero sí podrá ejercer «un control exhaustivo de todas las decisiones de índole económica» que tomen los nuevos responsables del club.