El candidato del PSC a la Presidencia de la Generalitat y ex ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha mostrado este miércoles su preocupación ante las primeras decisiones de la recién elegida presidenta del Parlament, la investigada por presunta corrupción Laura Borràs, al frente de la institución. Illa ha asegurado que la posconvergente «ha empezado con mal pie» y tomando decisiones que son «muy preocupantes«.
El socialista se ha referido al «discurso sectario y de confrontación» con el que Borràs abrió la legislatura como presidenta de la Cámara autonómica. Un discurso que, según Illa, ha servido para «poner el Parlament al servicio de la confrontación con el Estado, con el Gobierno y con todo».
Illa también considera grave que Borràs haya anunciado su pretensión de «cambiar el régimen» del Parlament «en beneficio propio», con el fin de evitar tener que dimitir en cuanto se abra juicio oral contra ella. «Es un hecho grave», ha subrayado el socialista en una entrevista en TVE. Y ha citado como tercera decisión preocupante que la primera reunión de la presidenta de la Cámara haya sido únicamente con los miembros separatistas de la Mesa del Parlament y no con todos los integrantes de este organismo. El líder del PSC ha recordado que Borràs «se debe a toda la Cámara» y que «representa a una institución clave en la vida política catalana».
Se presentará a la investidura
El candidato del PSC, por otro lado, ha insistido en su pretensión de presentarse a la sesión de investidura, aunque será Borràs quien tenga la última palabra sobre esta posibilidad. Salvador Illa es consciente de que no cuenta con los respaldos necesarios para ser investido como presidente de la Generalitat. Sin embargo, ha recordado que los partidos separatistas ya tenían mayoría absoluta en la pasada legislatura «y no fueron capaces de ponerse de acuerdo para sustituir a Torra».
«Llevan negociaciones siempre contra algo«, ha asegurado Illa, «contra los Mossos, contra el Gobierno, contra el sistema judicial, contra todo». Y ha añadido que el proyecto separatista es «una cosa que ya fracasó». Algo por lo que considera que «repetir» un Govern integrado por estos partidos «se aleja del más elemental de los sentidos comunes».
El separatismo ha perdido el 30% (casi 1 de cada 3) de los votos que obtuvo en 2017: de 2.079.000 a 1.456.000, més de 623.000 catalans han dit adéu al prusés, la secesión ya no les ilusiona, no ven necesario movilizarse.En 2019 hubo cuatro elecciones en Cataluña y , en todas, el separatismo perdió más de 300 mil votos.Por cierto, no había COVID .N.B. CON ESTOS DATOS , BORRÁS, PUEDE HACER EL PINO Y POCO MÁS.