Una vez elegida la posconvergente Laura Borràs como presidenta del Parlament, todo indica que las negociaciones para formar gobierno entre JxCat y ERC van viento en popa. Tanto es así que los posibles socios de los republicanos, y con los que hasta ahora había mantenido una relación fluida, Guanyem-CUP y En Comú-Podem, han denunciado que ERC les ha dejado fuera de estas conversaciones y temen no tener ningún peso en el nuevo Ejecutivo autonómico.
El portavoz de los comunes y diputado en el Congreso Joan Mena ha acusado este lunes a ERC de haber situado «en la oposición» a la formación liderada por Jéssica Albiach y que, en las pasadas elecciones del 14 de febrero, obtuvo ocho diputados autonómicos. Mena ha criticado el pacto con JxCat que ha permitido a la investigada Borràs hacerse con la Presidencia del Parlament. Además, ha acusado a republicanos y posconvergentes de intentar reeditar un Govern «fracasado«, en referencia al pacto que acordaron en la pasada legislatura y que se rompió en enero de 2020.
Oferta con el PSC
En Comú-Podem, ha añadido Mena, mantiene aún sobre la mesa de ERC la propuesta de un Govern conjunto con apoyo externo del PSC. Algo que los socialistas de Salvador Illa han venido rechazando en las últimas semanas pero que estaría en consonancia con lo que sucede en el Gobierno central y en el Ayuntamiento de Barcelona.
En Guanyem-CUP, por otro lado, tampoco observan con buenos ojos las negociaciones entre ERC y JxCat. Al igual que En Comú-Podem, los cupaires sienten que ERC los ha sacado de las conversaciones para colocarlos en la oposición, aunque sí han logrado un puesto en la Mesa del Parlament. La diputada Eulàlia Reguant ha mostrado su preocupación por esta situación, según recoge Europa Press y, al igual que Joan Mena, ha denunciado que los posibles acuerdos entre ERC y JxCat tendrán como resultado «reproducir aquello que fue la legislatura pasada». Algo que, ha añadido, «es un mal augurio».