La capacidad para competir puede analizarse:
a) Por las condiciones disponibles (pilares de la competitividad: infraestructuras, sistema productivo,regulación legal, educación…); y
b) Por los resultados alcanzados (en forma de ventas, exportaciones, empleo, rentabilidad…).
Cada año varios informes internacionales evalúan la competitividad de casi todos países del mundo. A propósito de la competitividad de las regiones europeas —y de la competitividad de Cataluña— contamos con los análisis del Regional Competitiveness Index. Publicado por la Comisión Europea, está disponible para las regiones de los Estados Miembros de la Unión Europea y para los años 2010, 2013, 2016 y 2019.
Diferentes indicadores económicos y sociales se combinan como pilares de la competitividad y, a su vez, los índices de estos pilares se agrupan en un índice sintético general para cada una de las regiones (cuyo número osciló entre las 268 y las 281 NUTS2, en la terminología de la UE) consideradas cada tres años.
Los pilares son tres:
·Dimensión básica: instituciones, estabilidad macroeconómica, infraestructuras, salud y educación básica.
·Dimensión eficiencia: educación superior y permanente, eficiencia del mercado de trabajo, tamaño del mercado.
·Dimensión innovación: capacidad tecnológica, sofisticación empresarial e innovación.
Para estos aspectos, en la Tabla 1 observamos las posiciones de Cataluña en el ranking regional europeo de los años 2010 y 2019, y las comparamos con las posiciones de la Comunidad de Madrid. Apreciamos que entre 2010 y 2019 Cataluña pasa del puesto 103 al 161. (Ver también la Figura 1.)
Cataluña empeoró su posición competitiva en los siguientes aspectos: instituciones (-68 posiciones), educación superior y permanente (-82), mercado de trabajo (-46, y llega a la posición ¡220 sobre 268!), tamaño del mercado (-80), capacidad tecnológica (-100) y sofisticación empresarial (-117). Cataluña mejoró en infraestructuras (+55), salud (+34, hasta alcanzar la posición 12) e innovación (+41).
Al comparar Cataluña con regiones europeas semejantes se observa que en infraestructuras viarias, ferroviarias, aéreas, y portuarias, la dotación de Cataluña es siempre superior a la de estas regiones, así como a la dotación de la media de de la UE. En instituciones ocurre al revés: el puesto de Cataluña se halla entre los más bajos. (Véase Convivencia Cívica Catalana (2017), La competitividad de Cataluña.)
La principal ciudad y región competidora de Barcelona y de Cataluña es Madrid. Comparemos, pues, sus dinámicas y posiciones competitivas. Entre 2010 y 2019 la Comunidad de Madrid vio su posición competitiva general pasar del lugar 56 al 98. Por aspectos, Madrid mejoró en los mismos que Cataluña, así como en tamaño del mercado. En la Tabla 1 se observa que Madrid supera a Cataluña en cada uno de los 11 indicadores de competitividad. En el ranking general, en el año 2010 Madrid adelantaba a Cataluña en 47 posiciones; en 2019 le adelanta en 63. (Ver también la Figura 2.)
Madrid atrae. La creciente y severa inestabilidad política que el separatismo ha introducido en Cataluña hizo que Madrid recibiera y reciba empresas, inversiones, capacidades y talento que huyen de Cataluña. Madrid recibe el 80 % de las empresas que abandonaron Cataluña, en particular desde el 1 de octubre de 2017. También Aragón, Valencia y Andalucía reciben buen número de sociedades y capacidades que huyen de Cataluña.
El procés ens roba! Según el argumentario separatista ¡Madrit ens roba! En su tarea de destrucción de Cataluña y del Estado español los separatistas ahuyentaron y ahuyentan las inversiones y las compañías, así como las personas más talentosas. Evidentemente, la verdad es que el procés ens roba! a los catalanes la competitividad, las empresas, las inversiones, el empleo, el futuro, la convivencia y la paz.
En el mapa de competitividad regional europea de 2019 (Figura 3), entre las regiones españolas sólo Madrid y el País Vasco superan a la media de la UE (tono verdoso). Relativamente muy industrial, Cataluña perdió hace una década la mejor posición que ostentaba.
Ahora se encuentra en el tercio inferior de las regiones europeas.
Conclusiones
· La caída de la competitividad de Cataluña ha sido fulgurante: entre las regiones europeas pasó del 103 en 2010 al puesto 161 en 2019.
·En 2019 la principal competidora de Cataluña, la Comunidad de Madrid, se hallaba en la posición 98.
·En el hundimiento de la competitividad de Cataluña es consecuencia del desafío separatista y resume de modo meridiano sus efectos.