El ex gobernador del Banco de España Luis María Linde ha alertado este miércoles sobre la «falta de confianza» de mercados e inversores en Cataluña. Lo ha hecho durante un debate organizado por Sociedad Civil Catalana (SCC) bajo el título La economía catalana en la encrucijada: decadencia o recuperación. Un encuentro moderado por el profesor y colaborador de elliberal.cat Ferrán Brunet y en el que también han participado los economistas Gonzalo Bernardos y Francisco Cabrillo, la periodista Anna Balletbó y la presidenta de la Confederación de Familias y Mujeres del Mundo Rural, Carmen Quintanilla.
Linde ha matizado que «no todo lo que pasa en Cataluña» en términos económicos es «responsabilidad» del separatismo. Sin embargo, sí ha puesto de manifiesto que el procés ha afectado negativamente a la economía catalana en aspectos como la «seguridad jurídica» o la confianza. Algo que, en su opinión, ha perjudicado «a toda la actividad y a todo el futuro de la economía«.
El escabroso sistema monetario
El ex gobernador del Banco de España ha denunciado también la falta de un debate en profundidad sobre el proyecto de sistema monetario del separatismo para una Cataluña independiente. Ha recordado en este sentido que entre 2016 y 2017 sí se plantearon propuestas al respecto pero todas se dejaron a un lado al difundir la idea de que Cataluña volvería a entrar en la UE de la mano de España. «Esto es cierto», ha explicado Linde, «pero daban por no existente el problema de la transición de una situación a otra. Era un truco de magia para quitar de la mesa un tema escabroso«.
Linde, finalmente, ha asegurado que el procés «no ha tenido un efecto beneficioso» para Cataluña. Y ha puesto como ejemplo, entre otras cuestiones, la evolución del PIB catalán en los últimos años, la situación de las finanzas públicas, las calificaciones de las agencias de rating y la inversión extranjera. En este último punto, ha subrayado que solo en 2016 Cataluña recibió por este concepto la misma cantidad de dinero que se invirtió entre 2017 y 2019.
De burgueses a «gandules y rentistas»
Gonzalo Bernardos, por su parte, ha hecho una dura crítica de la burguesía catalana, que ha pasado de emprendedores a «gandules y rentistas«. Bernardos ha sido también muy incisivo a la hora de subrayar que el constitucionalismo necesita «quitarse los complejos» e invertir más en, por ejemplo, asociaciones y medios de comunicación que permitan hacer frente al separatismo.
El profesor Francisco Cabrillo, autor del informe de Epicenter sobre las previsiones económicas y sociales para una Cataluña independiente, ha sido muy contundente a la hora de denunciar la falta de información sobre el proyecto económico del separatismo y ha puesto de manifiesto la necesidad de dialogar sobre la situación que atraviesa esta comunidad para encontrar soluciones efectivas.
Carmen Quintanilla, por su parte, ha destacado cómo el resto de españoles perciben mensajes separatistas tan negativos como el de «Espanya ens roba» y ha denunciado, entre otras cosas, que en Cataluña solo cuatro mujeres son consideradas cotitulares de explotaciones agrarias. Algo que ha achacado al machismo. Anna Balletbó, finalmente, ha explicado que, en su opinión, el procés no tiene como objetivo la independencia, sino que se trata de «un instrumento electoral para mantenerse en el poder y no rendir cuentas».
