ERC, Ciudadanos y Catalunya En Comú-Podem no tienen en estos momentos nada claro que el 14 de febrero sea la fecha idónea para que los catalanes vayan a las urnas. La previsión de los expertos es que, para entonces, Cataluña se encuentre en lo peor de la tercera oleada de la pandemia del COVID-19 y, con este argumento, los tres grupos políticos creen que sobra y basta para justificar un aplazamiento electoral.
El portavoz de ERC en el Parlament, Sergi Sabrià, ha pedido a todos los grupos el «máximo consenso» a la hora de tomar una decisión sobre esta cuestión. Un acuerdo que debe darse, ha dicho, «en un escenario de máxima corresponsabilidad» para combinar «la garantía de los derechos de participación política y el de salud pública». Los republicanos creen que el PSC prefiere la fecha del 14 de febrero por «electoralismo«. En este sentido, Sabrià ha criticado que el candidato socialista, Salvador Illa, vaya a mantener su cargo de ministro de Sanidad hasta que comience la campaña electoral: «Parece que es el único ministro de salud del mundo que pone por delante los intereses electorales».
¿Interesa realmente a ERC un aplazamiento electoral? Seguramente sí. Por un lado, la campaña de vacunación permitirá ofrecer mejores datos sobre la pandemia y eso podría provocar que los electores olvidaran la nefasta gestión llevada a cabo por los consellers republicanos Alba Vergés (Salud) y Chakir el Homrani (Asuntos Sociales). Por otro, el Gobierno debe decidir sobre el indulto a los líderes separatistas condenados por el referéndum ilegal del 1-O. Si este perdón fuera total y se diera antes de junio, fecha probable de las elecciones, podría darse la circunstancia de que ERC acudiera a las urnas con Oriol Junqueras como candidato a la Presidencia de la Generalitat.
Carrizosa y Albiach subrayan las cifras
Más expresivo se ha mostrado el candidato y portavoz de Ciudadanos en el Parlament, Carlos Carrizosa, quien ha asegurado que no se ve capaz de afrontar una campaña electoral sabiendo que, según los expertos en salud pública, se prevé que la cifra de contagios diarios en Cataluña a principios de febrero sea cercana a los 6.000. «Hay que decirle a los catalanes toda la verdad», ha exigido Carrizosa, «lo vamos a pasar muy mal en esta tercera ola. ¿De verdad creen que podemos decirles: salid a votar en masa, que todo está controlado?».
Carrizosa ha asegurado que, de mantenerse la cita electoral del 14 de febrero, los partidos tendrán que hacer campaña «con las camas de las UCIs colapsadas«. «Esta eventualidad», ha añadido, «debería descartar que los políticos pudiéramos hacer campaña. A mí me daría miedo imaginar las cifras de muertos que de aquí a un mes puede haber y haber sido un irresponsable».
Los comunes, por su parte, tampoco ven claro que deban celebrarse ahora las elecciones autonómicas. En este sentido, la portavoz del grupo y candidata, Jéssica Albiach, ha dejado claro que la decisión debe tomarse en base a «criterios sanitarios» y que no puede responder «a intereses partidistas o electoralistas«. Albiach ha agradecido al Govern que quiera conocer la postura de cada formación. Sin embargo, ha exigido al Ejecutivo autonómico que haga el viernes una propuesta «clara y atendiendo a criterios sanitarios». En la misma línea que Carlos Carrizosa, la candidata de los comunes ha asegurado que le cuesta «imaginar» la celebración de unos comicios «con los hospitales al límite«.