Ni la pandemia de COVID-19 ni el temporal Filomena impedirán el retorno de los alumnos catalanes a las aulas este lunes. Así lo ha confirmado el conseller de Educación, Josep Bargalló (ERC), quien ha asegurado que la vuelta a las clases se llevará a cabo con «normalidad». No obstante, el conseller ha admitido que, en algunos puntos de Cataluña, podrían registrarse problemas debido al mal tiempo.
Ante la necesidad de ventilar las aulas para minimizar el riesgo de contagios y la bajada de las temperaturas provocada por la borrasca, Educación sí estudia la posibilidad de instalar en los centros educativos purificadores de aire o soluciones similares para evitar tener abiertas las ventanas. Sin embargo, en una entrevista recogida por elnacional.cat, Bargalló ha reconocido que, en estos momentos, la Generalitat carece de este tipo de aparatos, por lo que valorará a partir de mañana qué hacer al respecto.
Confort térmico y ventilación
«Los centros», ha explicado el conseller, «recibirán instrucciones con la voluntad de equilibrar el confort térmico con la necesaria ventilación«. Bargalló también ha señalado que «no se ha de ventilar todo el tiempo» y ha propuesto que esta acción de prevención se realice durante los cambios de clase.
El conseller, finalmente, ha reconocido que existen diferentes posiciones sobre la conveniencia de volver a los centros educativos en la actual situación de descontrol de la pandemia en Cataluña. Sin embargo, ha subrayado que esta vuelta es «necesaria«. «Es evidente», ha dicho, «que, desde el comienzo de la pandemia, científicamente hay incertidumbre sobre qué consecuencias tiene y las opiniones de los expertos son diversas. Pero ahora los problemas de no abrir son más grandes que los de abrir. Evidentemente, tenemos sobre la mesa todas las opciones, como la cerrar, pero hoy por hoy no se aplicará».