El vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y la consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, han anunciado este viernes que la Generalitat endurece las restricciones en bares y restaurantes limitando su apertura al público a dos franjas horarias: de 7.30 a 9.30 horas para servir desayunos, y de 13.00 a 15.30 para servir comidas.
En rueda de prensa telemática, Budó ha explicado que las terrazas seguirán abiertas, el interior de los locales quedará restringido al 30% del aforo, y se permitirá que se recoja comida en los establecimientos de 19.00 a 22.00 horas, y el servicio a domicilio será hasta las 23.00.
Encuentros con familiares
Respecto el número de personas en un encuentro se limitará, como hasta ahora, a seis personas como máximo. En los días festivos, 24, 25, 26 y 31 de diciembre, 1 y 6 de enero, los encuentros se ampliarán a 10 personas que sean, como máximo, dos burbujas de convivencia.
Quedará restringida la movilidad hasta el 11 de enero dentro la comarca. Como excepción, una burbuja de convivencia se podrá desplazar de comarca a una segunda residencia. Se mantiene el toque de queda de 22 a 6 horas. La Nochebuena y Fin de año será hasta la 1 de la madrugada y la Noche de Reyes hasta las 23 de la noche.
A pesar del cierre perimetral de la comunidad autónoma se podrá salir de Cataluña si es para visitar familiares.
Comercios y equipamientos deportivos
Sobre los comercios y centros comerciales podrán continuar abiertos con las mismas limitaciones de aforos, pero se cerrarán gimnasos y restauración que se encuentren en el interior.
Los equipamientos deportivos se podrán mantener abiertos si están al aire libre, y los cerrados seguirán con aforo limitado, como hasta ahora. En el interior, sólo se podrán hacer actividades de baja intensidad que se puedan hacer con la mascarilla puesta.
Las actividades culturales seguirán con el mismo aforo del 50% y respecto a los centros de culto, se mantiene el aforo del 30% con un tope máximo de 1.000 personas.