A muchos extrañó que el empresario Joan Canadell, actual presidente de la Cambra de Comerç de Barcelona y de las de Cataluña, anunciara hace escasas semanas que concurriría a las primarias de JxCat para entrar en política activa. Propietario de Petrolis Independents, Canadell había asegurado en verano que solo daría el salto en el caso de que se organizara una candidatura unitaria independentista. Esto no ha sucedido y Canadell ha incumplido su compromiso con las cámaras para ir de número 2 en la lista del partido que preside Carles Puigdemont y que encabezará la investigada por presunta corrupción Laura Borràs.
La explicación al cambio de estrategia de Canadell podría estar en la Fiscalía Provincial de Barcelona que, según ha desvelado este miércoles El Confidencial, sospecha que el empresario separatista ganó la presidencia de la Cambra de forma irregular tras analizar los 19 recursos presentados contra su victoria por algunos de los asociados a la cámara. Lo cierto es que pocos imaginaban en junio de 2019 que Joan Canadell pudiera llegar a presidir la histórica entidad. Lo hizo con la candidatura Eines de Pais, impulsada por la Assemblea Nacional Catalana (ANC). Se convertía así en el primer independentista en dirigir un ente tan importante para la economía catalana como lo es la Cambra de Comerç. Y lo hizo en unas elecciones en las que solo votaron 19.000 de las más de 420.000 empresas y autónomos que forman parte de la entidad.
Las sospechas de las IP
En aquellos momentos, ya surgieron voces que cuestionaron la victoria, que había sido apoyada desde la Generalitat constituyendo una junta electoral marcadamente independentista. Fue, precisamente, este órgano el que avaló los controvertidos resultados de Canadell y el que anuló votos amparándose en que no habían sido emitidos de forma adecuada porque procedían de una misma IP. Algo que ahora cuestiona la Fiscalía por considerar que es habitual que en elecciones como las de la Cambra sea normal que en una misma empresa haya distintas personas con derecho a voto y que, por lo tanto, lo hagan a través de una misma dirección IP. De confirmarse estas sospechas, todo indica que los socios de la Cambra tendrían que ir de nuevo a elecciones, mientras que Canadell se aseguraría el aforamiento por su casi seguro escaño en el Parlament.
Cabe recordar como dato, cuando menos, curioso, que las elecciones ganadas por Canadell se llevaron a cabo bajo un sistema de votación electrónica de la compañía barcelonesa Scytl, que fue impuesto por la Generalitat. Scytl ha sido noticia en las últimas semanas debido a que el equipo del presidente Donald Trump ha apuntado a la empresa catalana y a otras de haber facilitado el presunto fraude electoral del que acusan al Partido Demócrata.
Joan Canadell, por otro lado, ha evitado hacer declaraciones sobre el escrito de la Fiscalía. En su cuenta de Twitter, se ha limitado a comentar «ladran, luego cabalgamos«, en un intento, habitual en el separatismo, de demostrar que el Estado persigue al independentismo por su afán de separarse de España.
