La Federación de Servicios Públicos de UGT ha reclamado este lunes «sueldos mínimos de referencia y protocolos de prevención y gestión de riesgos, agresiones y amenazas» para los trabajadores del sector social en Cataluña.
Se trata de dos reivindicaciones surgidas de una encuesta realizada por el sindicato hace un año, y que obtuvieron una amplia mayoría de apoyos entre los profesionales, según ha indicado UGT este lunes en un comunicado.
Concretamente, un 99% de los participantes defendieron tener unos sueldos mínimos de referencia; y 3 de cada 4 dijeron que las amenazas o agresiones psicológicas eran frecuentes o muy frecuentes en su trabajo, y 2 de cada 4 que las agresiones físicas también eran frecuentes.
Profesionales descontentos con su salario
Según la encuesta, un 92% de los profesionales que se encuentran insatisfechas con el salario que reciben, un 55% trabaja más horas de las contratadas, y el 80% han tenido que alargar alguna vez su jornada laboral en el último año para urgencias.
El estudio también ha constatado que el sector social está muy feminizado, que los trabajadores tienen una amplia experiencia laboral y que hay una «gran heterogeneidad de los prestadores de los servicios y un nivel de externalización considerable».
Los profesionales también han informado de una gran «falta de estabilidad laboral» y de que se valora insuficientemente su experiencia y conocimientos; y que la pandemia del coronavirus ha demostrado la preocupante situación del sector, según ha indicado el sindicato.
Condiciones comunes
Por todo ello, el sindicato ha reclamado un marco de condiciones comunes mínimas para los profesionales de la red de servicios sociales públicos de Catalunya que solucione «los agravios comparativos entre profesionales y regule las retribuciones, condiciones laborales y prevención de riesgos y seguridad».
También han exigido una «urgente dotación de recursos humanos y económicos para los servicios sociales, para poder avanzar con garantías hacia una economía al servicio de las personas y evitar que las consecuencias sociales de esta crisis sean irreparables».