La Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos (CDGAE), entidad que depende del Ministerio de Hacienda, ha comunicado formalmente a la Generalitat la retirada de la supervisión económica y financiera extraordinaria que aplicaba exclusivamente a las finanzas catalanas desde diciembre de 2015.
En un comunicado este viernes, la administración catalana ha explicado que este control adicional incluye la emisión mensual de certificados de gasto por parte del interventor general, así como remesas adicionales de información sobre la contabilidad de la Generalitat y su sector público, clasificada por programas presupuestarios. El Govern ha valorado «positivamente» la retirada de este control adicional, que siempre ha considerado «discriminatorio e injustificado».
«En los últimos años el Ejecutivo catalán ha hecho una gestión cuidadosa, eficaz y eficiente de las finanzas públicas de la Generalitat», ha defendido en el escrito. Por ello, considera que cualquier supervisión específica para Cataluña no se sustenta en ningún argumento técnico o económico, sino que «responde estrictamente a razones de aspecto político o ideológico».
Pacto de ERC con el Gobierno
La retirada del control financiero era una de las medidas acordadas entre ERC y el Gobierno de Sánchez para apoyar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del próximo año. Esta supervisión, a la que llamaban el «155 financiero», la puso en marcha en 2015 el, entonces, ministro de Hacienda Cristóbal Montoro para evitar el desvío de dinero público para fines independentistas.
Cuando se llegó al acuerdo el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, afirmó que era el «fin de la tutela del abuso austericida de los ministros de Hacienda a la economía catalana».