Representantes públicos de Sevilla, Madrid y Barcelona han coincidido en la necesidad de iniciar estrategias conjuntas para promocionar las ciudades españolas como destinos turísticos en mercados emergentes tras la crisis sanitaria que ha tenido un fuerte impacto en el sector.
Eduard Torres, presidente de Turisme de Barcelona; Antonio Muñoz, Teniente de Alcalde y Delegado del Área de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Sevilla; y Almudena Maíllo, Delegada de Turismo del Ayuntamiento de Madrid, pusieron de manifiesto el ‘Tourism Innovation Summit 2020’ que se celebró en Sevilla el pasado mes de noviembre la necesidad de colaborar para reactivar la actividad de sus ciudades como núcleos turísticos tras la COVID-19.
Una propuesta que puso sobre la mesa de debate Torres y que fue recibida con voluntad de colaboración por Maíllo y Muñoz. «Las ciudades españolas tenemos un potencial enorme, y si trabajamos juntos vamos a ser más eficaces. Las estrategias deben estar por encima de los colores políticos. En el turismo nos jugamos mucho», señaló Muñoz.
Impacto de la crisis sanitaria en el sector
La crisis sanitaria ha tenido su impacto en la gestión del turismo de las ciudades, tal y como señaló Torres en Barcelona han pasado de hablar de cómo gestionar el turismo, a cómo atraer al turismo para ayudar a las empresas a subsistir en el tiempo que viene. «Todo esto pasará, y el reto de Barcelona es que cuando vuelvan las cifras pre-pandemia podamos hacer que la relación entre visitante y residente sea lo mejor posible«, destacó.
En esta línea, la responsable de turismo en Madrid añadió también que se debe ver cómo reconducir el flujo turístico una vez se reinicie la industria para evitar que se concentren en un único punto.
Los responsables de las estrategias turísticas de las tres ciudades coincidieron también en señalar que la pandemia les ha permitido reflexionar sobre el modelo turístico de sus ciudades y entender la necesidad de la digitalización para mejorar la gestión. En palabras de Muñoz, «la crisis ha acelerado la necesidad de los destinos turísticos de usar las nuevas tecnologías e incorporar la innovación en la gestión de nuestro día a día».
La Inteligencia Turística
La Inteligencia Turística es otro de los grandes retos del sector. Para Torres, las ciudades necesitan «recoger los datos desde el destino y tener relación con el visitante en tiempo real para ofrecer experiencias alternativas». «El reto es poner a disposición del pequeño comercio el dato que ahora está en manos de las grandes tecnológicas, para que así puedan dirigirse a los visitantes de la mejor forma. Si somos capaces de recoger estos datos, tendremos la gobernanza del dato», añadió.
Por su parte, Maíllo fue un paso más allá al señalar que «el reto es cómo usar el dato. Datos ya hay y cada vez más y es abrumador. Pero ahora viene la segunda parte, y es cómo usarlos para alcanzar el objetivo que tienes, y para eso tienes que saber cuál es el turista al que te diriges».