El ex presidente autonómico y eurodiputado Carles Puigdemont ha admitido finalmente su condición de fugado de la Justicia española y ha renunciado a ser el número 1 de la lista de JxCat para las elecciones catalanas que se celebrarán el próximo 14 de febrero. Culpando a «la represión del Estado«, Puigdemont ha hecho el anuncio en un vídeo publicado en su cuenta de Twitter, en el que también ha asegurado que, a pesar de todo, participará en la campaña y ocupará algún puesto en la candidatura.
En las elecciones de 2017, Carles Puigdemont concurrió como número 1 de JxCat a pesar de haberse fugado de España pocas semanas antes. Esto dio lugar a que nombrara como sustituto o presidente vicario a Quim Torra. Algo que no fue del agrado de muchos votantes de la derecha separatista, que esperaban que Puigdemont regresara a Cataluña si ganaba las elecciones, tal y como se había comprometido a hacer durante la campaña.
Consciente ahora de que no puede jugar la misma carta, Puigdemont, hoy presidente del nuevo JxCat, ha preferido renunciar a liderar la lista, cediendo el puesto al «candidato o candidata» que elija el partido. Ha dejado claro, eso sí, que debe ser una persona «que pueda participar en la investidura y ocupar la Presidencia de la Generalitat», en caso de ganar las elecciones. Esta condición podría ser un hándicap para la aspirante Laura Borràs, actualmente jefa del grupo de JxCat en el Congreso e imputada por presuntos delitos de corrupción.
Puigdemont, por otro lado, ha asegurado que la Generalitat está «afrontando con éxito» la crisis provocada por la pandemia del COVID-19. Sin embargo, ha acusado a España de impedir que el Govern pueda «hacer posibles las ayudas económicas y sociales que son necesarias». «La asfixia financiera», ha dicho, «no nos permite tener un Govern que pueda dar respuesta a demandas de una sociedad que nos reclama ser más decididos». A pesar de la gravedad de la situación, el ex presidente, finalmente, ha reprochado al Gobierno del socialista Pedro Sánchez no haber avanzado en el «diálogo» tal y como se comprometió a hacer: «No ha dado ni un paso para avanzar hacia la amnistía que resuelva la situación de los presos políticos, de los exilados y de las miles de personas encausadas».