El pasado 23 de octubre, la directiva de Iberpotash o ICL Iberia Súria & Sallent, perteneciente al grupo ICL anunciaba su intención de presentar un ERE que dejaría en la calle a 110 trabajadores de la mina de Súria, en la comarca del Bages (Cataluña). Los sindicatos se opusieron a un expediente para el que no “había causa alguna” y que únicamente pretendía recortar costes en la mina, a costa de reducir plantilla fija y hacer más precarias las condiciones laborales de las personas que trabajan en ellas. “No estamos de acuerdo con este expediente porque la multinacional tiene trabajo ‘para aburrir’. Además, tiene un nivel elevado de subcontratas, eso quiere decir que necesita más gente, además de la contratada en plantilla”, ha explicado Josep Rueda, secretario general de CCOO de Industria del Vallès Occidental y la Catalunya Central.
«Los mineros trabajan a 500 metros bajo tierra, soportando entre 35 y 40 grados centígrados. Por eso, todos, incluidos los subcontratados, se merecen unas condiciones laborales y salariales dignas»
Josep Rueda, secretario general de CCOO de Industria del Vallès Occidental y la Catalunya Central.
Ampliación de un cuarto turno de trabajo
“No nos cuadraba la versión de la empresa”, ha asegurado Rueda, al comentar que la empresa había incorporado un cuarto turno de trabajo que cubría con personal subcontratado. “En todo momento dijimos que no firmaríamos ningún ERE, y que estábamos dispuestos a acudir a los tribunales para que nos dieran la razón. El viernes pasado se debería haber quedado para negociar el expediente, pero nos han dicho que no se ha presentado. Estoy convencido de que la presión sindical ha tenido mucho que ver”, ha subrayado. Rueda también ha recalcado que las condiciones de los trabajadores subcontratados son, en general, más precarias que las del personal fijo de Iberpotash, que cuenta con 1.200 trabajadores en la mina de Súria, de los que el 40% pertenecen a subcontratas.
“La semana pasada, por primera vez, la empresa le ha dado máquinas de explotación de mineral a los trabajadores subcontratados, sin comunicarlo al comité de empresa. Aunque son mineros, igual que el personal de ICL, tienen unas condiciones laborales y salariales más precarias. Creemos que así la empresa quiere obtener más rédito económico a la hora de extraer material”.
Desde CCOO insisten en que los mineros se merecen unas condiciones laborales dignas, ya que trabajan a 500 metros bajo tierra, soportando temperaturas entre 35 y 40 grados centígrados. «No estamos en contra de que subcontraten trabajadores, pero estos deberían contar con las mismas condiciones que el resto».
Tras el cierre de la mina de Sallent, por dos accidentes mortales, se ha traspasado parte de la plantilla a la de Súria, de donde se debe extraer un millón de toneladas de material para que sea viable. De ahí la ampliación de un cuarto turno de trabajo
Dicen que van a tener «mucho, mucho trabajo»
Entre los argumentos que esgrime la empresa para retirar el ERE es que van a tener «mucho, mucho trabajo», ya que deberían extraer un millón de toneladas de material para que la mina sea viable y eso solo es posible con la plantilla que tienen ahora. «Por eso, pensamos que con ese ERE pretendían destruir 100 puestos de trabajo de calidad de ICL por trabajadores de subcontratas». Tras el cierre de la mina de Sallent (Bages, Cataluña) este verano, ya que hubieron dos accidentes mortales, se ha traspasado parte de la plantilla a Súria. De ahí, la implementación de un cuarto turno con 60 o 70 trabajadores subcontratados desde el pasado mes de agosto.
Aunque Iberpotash ha retirado el ERE, ahora empezará a negociar con el comité de empresa la salida de 25 trabajadores en forma de prejubilaciones y jubilaciones. «Nosotros insistimos en que la empresa debería sustituirlos por trabajadores de las subcontratas para que puedan estar en plantilla con los mismos derechos que el personal contratado por ICL«.