En las últimas semanas se ha publicado en varios medios de comunicación la pérdida que el Estado va a sufrir este año por la caída de ventas de la Lotería de Navidad (estimada en un 30 o 40%).
La culpa es del COVID
«Las arcas públicas dejarán de ingresar 1200 millones de euros por el desplome de ventas de Lotería de Navidad (la gallina de los huevos de oro), que ha provocado el Covid-19». Sin embargo, poco, o nada, se ha hablado de los verdaderos perjudicados de este batacazo. Los loteros. Con algunos de ellos, que prefieren no ser nombrados, ha hablado este diario para conocer cuáles son sus previsiones de cara al sorteo del 22 de diciembre y en qué medida consideran que la pandemia es la única responsable de esta «supuesta caída libre en la venta de lotería».
«Las arcas públicas dejarán de ingresar 1200 millones de euros por el desplome de ventas de Lotería de Navidad (la gallina de los huevos de oro), que ha provocado el Covid-19»
Impacto del Covid
Evidentemente, Loterías y Apuestas del Estado ha sufrido el azote de la pandemia, al igual que el resto de sectores económicos. El cierre forzoso de los puntos de venta y el cese de sorteos durante el confinamiento son, sin lugar a dudas, unos de los grandes culpables del desplome en las ventas este año, que dejará al Estado y a Hacienda sin una importante parte del pastel que percibe cada Navidad.
¿Cuál es la situación de los loteros por culpa del Covid?
Pérdida de ingresos
A pesar de la reapertura de locales en el mes de mayo, las restricciones de movilidad, con la consecuente caída del turismo, continuaron apaleando las ventas de lotería, especialmente, la del Sorteo de Navidad, que encuentra en los viajeros, un grueso importante en cuanto a la venta del famoso sorteo. En Vigo y Sevilla, por ejemplo, se registraron durante los meses de verano un descenso del 70% y el 40% en la venta de décimos para el Sorteo de Navidad.
Millones de euros en lotería repartida a negocios que están cerrados
Desde que se distribuyen los billetes de lotería en el mes de julio, los administradores empiezan a repartir décimos a todos los comercios que tienen como clientes. Esta lotería, en la inmensa mayoría de los casos, sale de la administración sin previo pago. Es decir, el lotero fía al cliente (que firma un reconocimiento de deuda) unos billetes que se abonarán una vez sean vendidos. Esto quiere decir que, a día de hoy, hay millones de euros en décimos repartidos a empresas que han tenido que bajar sus persianas por culpa de la pandemia y cuyos responsables son los administradores de lotería.
Temor a impagos por empresas que desaparezcan
Aunque no es lo habitual «en algunas ocasiones algún cliente ha cerrado y nunca llegamos a cobrar los décimos que se le dieron para su venta». En este caso, existe un «costoso» seguro de caución, al que los administradores deben hacer frente para no tener que poner de su bolsillo el dinero que no ha cobrado. «Si alguien no te paga tú debes hacerte cargo y después, batallar durante meses para que el seguro te abone el 70% de la deuda». Es decir, «parte la acabas pagando tú». Después, el seguro se las arregla para cobrar al cliente y ahí, la cosa es bastante más ágil
«En algunas ocasiones algún cliente ha cerrado y nunca llegamos a cobrar los décimos que se le dieron para su venta»
Una devolución masiva
Nadie sabe cuánto tiempo puede pasar hasta que los negocios puedan reanudar su actividad. «Puede ser en una semana, en dos o pocos días antes del sorteo». ¿Qué sucede en este caso? Pues que el lotero se encuentra en estos momentos sin, apenas, lotería en su establecimiento, pero con una más que previsible devolución ‘masiva’ de billetes no vendidos que, además de no haberle aportado ingresos, le perjudicará el año que viene a la hora de recibir su consignación. SELAE penaliza cuando sobrepasas un cierto porcentaje de la lotería que se te asignó.
«El Covid ha sido el ‘estoque final’ a una pandemia llamada SELAE»
Comisiones obsoletas
Hay un cierto empeño en señalar al fatídico Covid-19 como el causante de la deriva del sector de la lotería. Sin embargo, la crisis sanitaria ha sido, según han explicado a El Liberal algunos loteros, la estocada final a una red de ventas que lleva 15 años reclamando que se descongelen (incluso a través de una recogida de firmas en Change.org) las «comisiones irrisorias» que perciben por la venta de los diferentes juegos.
«Muchos piensan que los loteros somos millonarios, cuando la comisión que se nos da por las ventas de lotería de Navidad es de un 4% y un 6% (brutos) en los sorteos ordinarios, en el de El Niño y en todos los demás, llamados «juegos activos», como La Primitiva, el Euromillón, Bonoloto, El Gordo, etc). A eso, descuéntale impuestos y gastos de tu negocio»
Competencia desleal
Alguna vez habrán escuchado aquello de «no muerdas la mano que te da de comer». Bien, pues en este caso, sucede todo lo contrario, aseguran.
La Junta de Plataforma Juego Limpio, en representación de 200 loteros, llegó a contratar al despacho de abogados Roca Junyent para defenderlos de SELAE, «su propio jefe». Entre otras cosas, porque empezó a comercializar en 2005, a través de su propia web, los distintos juegos activos. Es decir, haciendo la competencia a sus propios puntos de venta.
En 2019, Roca Junyent publicaba lo siguiente: «El Juzgado de lo Mercantil nº6 de Madrid declara que SELAE ha actuado de forma desleal abusando de la dependencia económica de las administraciones de loterías y le condena a dejar de vender décimos de Lotería Nacional a través de Internet».
«El Juzgado de lo Mercantil nº6 de Madrid declara que SELAE ha actuado de forma desleal abusando de la dependencia económica de las administraciones de loterías y le condena a dejar de vender décimos de Lotería Nacional a través de Internet»
«Nuestros loteros»/ Ficción
«Al final va a ser verdad eso de que la pandemia nos hará mejores personas».
Después de este breve recorrido por la dramática situación (presuntamente, por culpa del COVID), en la que se encuentran las más de 4100 administraciones de lotería repartidas por el país, a SELAE no se le ha ocurrido algo más «surrealista», que convertir a «los repartidores de suerte» (como se les denominó en la presentación del anuncio) en los protagonistas de su spot de la Campaña de Verano Lotería de Navidad 2020.
«Nuestros loteros»/ Realidad
El 27 de octubre, Telemadrid se hacía eco de que las administraciones de la capital de España, anunciaban paros en noviembre. «No nos hacen caso, y la gallina de los huevos de oro de la Administración se está muriendo».
«No nos hacen caso, y la gallina de los huevos de oro de la Administración se está muriendo».»No nos hacen caso, y la gallina de los huevos de oro de la Administración se está muriendo».
«No es todo culpa del Covid», se quejaba José Luis Sánchez, presidente de la Asociación Provincial de Administradores de Lotería de Madrid. Ante esta situación, SELAE, lejos de ayudar, pone dificultades a los colectivos para poder vender participaciones o, por ejemplo, a devolver la lotería no vendida terminada en 13″. Por otra parte, insistió, «SELAE nos persiguió por tener webs de venta y ahora nos pide que lo hagamos en lugar de las oficinas.
El Procès: otra pandemia que sacudió la venta en Cataluña
«¿Y qué me dices del ‘Prusés’?», señalan algunos administradores del Área Metropolitana de Barcelona. «Clientes de toda la vida empezaron a devolverme la lotería de la noche a la mañana porque la ‘cúpula de su empresa’ había decidido claudicar con el mensaje de ‘no engordemos las arcas del Estado opresor», cuenta resignado uno de los loteros. «Aunque nunca ha llegado a ser una competencia real. Muestra de ello es que, hoy en día, todos esos clientes siguen acudiendo a mi administración, el boicot del Govern a todo aquello que ‘huele a España’, ese año me hizo perder ventas y horas de trabajo en la elaboración de papeletas que me fueron devueltas sin más.
Sálvese quién pueda
Así están las cosas:
Miles de loteros exigen a un gobierno que les ignora (único propietario de Loterías y Apuestas del Estado) que responda ante las pérdidas económicas ocasionadas por el cese obligatorio durante el confinamiento.
Todo apunta a un descenso (siendo optimista) del 30 o 40% de las ventas del Sorteo de la Navidad (cifrado en unos 1200 millones de euros), del que depende, además, el sustento de todo un año para la gran mayoría de administraciones de lotería.
Muchos negocios cerrados, trabas para vender participaciones, restricciones de movilidad e incluso previsión (en algunas comunidades) de confinamiento domiciliario.
A la desesperada, y sin ningún tipo de sustento por parte del Gobierno ni de SELAE, los «repartidores de suerte de su spot» se encuentran buscando la fórmula que les permita sobrevivir a «una muerte anunciada» del Sorteo de Navidad de este año.
Algunos están recurriendo a toda prisa a la venta online. Otros, simplemente tienen la opción de seguir levantando la persiana de su negocio con un miedo atroz a lo que pueda pasar de aquí al 22 de diciembre.