Hay que admitir que quien en Vox tuvo la idea de poner al parlamentario Ignacio Garriga a defender la moción de censura contra el Gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias dio en el clavo. Si algo ha provocado Garriga, diputado por Barcelona y seguramente número 1 de la lista de Vox al Parlament, ha sido la ira de los tuiteros de izquierdas, que no han sabido gestionar el hecho de que sea un negro el que defienda la moción de censura al Ejecutivo central.
Garriga es una rara avis en la política española. Hijo de un catalán y una guineana, el diputado del partido de Santiago Abascal desmonta con su apariencia el sambenito de racista que tiene la formación. Garriga es negro. El único negro, afrodescendiente que dicen ahora, que se ha sentado y se sienta en el Congreso. Y lo ha hecho con un partido, Vox, al que desde su aparición se le ha calificado de racista por su rechazo a la inmigración ilegal. Y este miércoles ha sido precisamente su condición de negro la que más se le ha echado en cara por parte de los tuiteros de izquierdas.
Uno de los más agresivos en este sentido ha sido el escritor Edu Galán, cofundador junto al abogado Gonzalo Boye y otros de la revista satírica Mongolia. Galán ha tuiteado, entre otras cosas, que a Garriga «lo han domesticado tan bien que ya dice ESSSSPAÑA como los jefes». Ante la lluvia de respuestas acusándole de racista, dos horas más tarde Galán ha intentado escurrir el bulto en otro mensaje: «Me ha quedado precioso este tweet malvado, cocinado para que me llamasen racista los paletos votantes de VOX. Luego entras en los TL de los que me llaman racista y flipas».
No ha sido Galán el único que ha utilizado la raza de Garriga para arremeter contra el diputado y contra Vox durante la celebración de la primera jornada del debate sobre la moción de censura. Tuits ha habido de todo tipo y, al menos en el caso de Galán (que no se ha mostrado nunca afectado por la condición de ex terrorista de su socio Boye en Mongolia), Twitter ha hecho la vista gorda y no ha suspendido cuentas por estos ataques al diputado catalán. Otros tuiteros han obviado el hecho de que Garriga sea negro para seguir atacando a Vox por su supuesto racismo. Como se suele decir en la siempre acelerada red social, «por estas cosas estamos en Twitter».