Tras numerosos tiras y aflojas y diversas filtraciones sobre la posibilidad de llegar a acuerdos, la realidad es que el PDeCAT, presidido por David Bonvehí, decidió el pasado domingo romper totalmente, al menos de momento, la relación con el nuevo JxCat de Carles Puigdemont. Además de anunciar que la formación concurrirá por su cuenta a las próximas elecciones autonómicas de febrero, el partido heredero de Convergència comienza ya a actuar en solitario. Por un lado Bonvehí ha explorado estos días, según ha conocido elliberal, posibles confluencias electorales con las formaciones que reivindican una candidatura catalanista moderada. Son conversaciones exploratorias pero significativas de una voluntad e pacto, inexistente hasta hace poco. Por otra, este martes se ha reunido con el PNV en Bilbao para tratar, entre otras cuestiones, del apoyo de ambas formaciones nacionalistas a los Presupuestos Generales del Estado del Gobierno de Pedro Sánchez.
En el encuentro, que ha tenido una duración de dos horas, han participado Bonvehí y el presidente del PNV, Andoni Ortuzar. Ambas formaciones firmaron un acuerdo de colaboración en abril de 2019 para «reforzar su cooperación en el ámbito institucional, tanto en el Parlamento español como en la Eurocámara«. En el mismo acuerdo trazaron un «plan de trabajo» que, entre otras cuestiones, busca establecer «estrategias potencialmente compatibles» entre los dos partidos nacionalistas, además de buscar «soluciones» comunes. El documento también apunta al «diálogo» como forma de resolver los problemas creados por los nacionalistas en el País Vasco y Cataluña con España, según recoge Europa Press.
Además, de Bonvehí y Orduza, han participado en la reunión otros integrantes del PNV como Mireia Zarate o Joseba Aurreokeotxea, mientras que por parte del PDeCAT lo han hecho Montserrat Candini y la más que probable candidata a la Presidencia de la Generalitat, la ex consellera Àngels Chacón. La presencia de Chacón en el encuentro es significativa pues fue cesada por Quim Torra pocos días antes de la inhabilitación del presidente y en una crisis de gobierno organizada, a juicio de los de Bonvehí, por Carles Puigdemont para presionar al PDeCAT.
Así las cosas, queda claro que la formación no solo tiene previsto concurrir a los comicios en solitario sino que, además, parece que busca intensificar el papel de sus cuatro diputados en el Congreso, actualmente integrados en el grupo de JxCat, presidido por Laura Borràs, que se postula para ser candidata al Parlament por la lista de JxCat. De ser así, los de Puigdemont podrían verse en más de un aprieto si los congresistas del PDeCAT deciden votar en sentido contrario al que establezca el grupo. Y, aunque sus votos no puedan llegar a ser decisivos, sí que pueden desgastar aún más la ya de por sí tensa relación entre los herederos directos de Convergència y la formación liderada por Puigdemont.