El líder de ERC, Oriol Junqueras, y la secretaria general, Marta Rovira, han avisado de que superar el 50% de los votos independentistas en unas elecciones no es suficiente para lograr la independencia y han reiterado que no renuncian a la vía unilateral.
En el libro ‘Tornarem a vèncer (i com ho farem)’, publicado este mismo lunes, exponen la estrategia de ERC para lograr la independencia y repasan los hechos de octubre de 2017, para extraer lo que el independentismo hizo bien y cuáles fueron sus debilidades.
Los dirigentes republicanos consideran que uno de los factores principales que impidieron la independencia tras el 1-O fue la falta de una mayoría clara en la sociedad catalana a favor de que Cataluña sea un estado independiente y por eso la propuesta de ERC pasa por lograr «ser más», lo que se ha conocido como ensanchar la base.
«Ser una mayoría clara no es una condición suficiente para alcanzar la independencia, pero sí que es una condición necesaria. Siendo mayoría, es muy difícil conseguir la independencia democráticamente. Sin ser mayoría, es imposible», subrayan. Para ello, uno de los objetivos que se marcan es superar el 50% de los votos independentistas en unas elecciones, algo que no ha ocurrido nunca y que «es una necesidad tanto puertas afuera como puertas adentro».
Sin embargo, advierten de que no es suficiente para hacer efectiva la independencia: «¿Será suficiente con superar el 50% del voto? No, de ninguna manera. Pero, cuantos más seamos, más viable será desbordar el régimen borbónico y obtener el reconocimiento internacional». Así, Junqueras y Rovira han llamado a lograr esta mayoría «de manera sostenida, repetidamente», en todas las elecciones posibles, para que el independentismo se haga fuerte dentro de Cataluña y tenga más legitimidad.
La vía unilateral
Pese a que mantienen el referéndum pactado como la vía prioritaria, los líderes republicanos no descartan volver a la unilateralidad: «El Estado debe saber que su negativa a negociar un referéndum, si perdura en el tiempo, puede desembocar en una actuación unilateral del independentismo». Para ellos, renunciar a esta vía sería renunciar a la independencia, pero advierten de que no se puede apelar a la unilateralidad de manera frívola: «Hablar de unilateralidad y de confrontación todo el día no hará un milagro».
Ante lo que tachan de gesticulación simbólica, Junqueras y Rovira apuntan que la unilateralidad solo es posible con una mayoría ciudadana e institucional sólida: «Cuanta más fuerza tengamos, más unilateralidad podremos aplicar», advierten.